como los monos de gibraltar

jueves, 12 de noviembre de 2009


3 comentarios:

Superwoobinda dijo...

Menuda hijaputa, pobre bichín. Le meaba yo en un ojo estirándole un parpado a ver si le hacia gracia.

Haciendo Amig@s dijo...

Ojalá le venga una tortuga ninja vengadora y le defeque en la boca.

un sorbito de champagne dijo...

Si los santones indios se beben sus meaos como dieta purificadora y viven cientos de años, no sé qué tiene de malo que le refresquen a un galápago con lluvia dorada, a no ser que la joven orine vitriolo como el mostro que acosaba a la teniente Ripley. Ahí ya me callo a la madrileña...