como los monos de gibraltar

domingo, 30 de mayo de 2010

CIENCIA FICCIÓN GUARRA 27: XTRO, problemas matrimoniales intergalácticos

La ciencia ficción guarra, aunque centrada en la función fisiológica de la cópula, no duda en tratar desde su particular óptica los temas relacionados indirectamente con el sexo. Es por eso que nos encontramos con películas del género que aportan interesantes puntos de vista sobre las relaciones personales y de pareja, ese molesto derivado de la sexualidad humana. Por mucho que lo neguemos, cosas como el matrimonio, la familia, los sentimientos de apego por el otro, son subproductos residuales del afán reproductivo que, en muchas ocasiones, le quitan relevancia al instinto reproductor. Estos inquietantes efectos secundarios del deseo de follar a toda costa son los  protagonistas de XTRO (1983), película británica que podriamos definir, de forma simplista, como la versión hijoputa de ET.
Un honrado padre de familia es abducido por un ovni durante un fin de semana en el campo. La desconsolada esposa, que se queda a cargo de un hijo, ante la desaparición inexplicable de su marido, rehace su vida junto a un moderno, un fotógrafo de modas bastante capullo (aunque quizá esto no hace falta precisarlo, una cosa lleva implícita la otra). Como no podía ser de otro modo, el marido vuelve del espacio convertido en un bicho capaz de adoptar su antigua forma humana, pero que ya poco tiene de persona y sí mucho de alien cabrón capaz de poner patas arriba la tranquila rutina de su antigua familia. La cosa empieza fuerte, con el inmigrante retornado fecundando a una mujer que pasaba por allí y usándola para encarnarse en su antiguo cuerpo en una alucinada escena de embarazo exprés y un parto traumático en el que la pobre hembra da a luz a un señor adulto. 
El marido se reencuentra con su antigua familia al estilo de "fui a por tabaco y no sé que me pasó", creando una caos de tensiones y sentimientos contradictorios en su mujer, su amante y su pequeño hijo. Pronto el asunto se vuelve siniestro cuando el cónyuge intergaláctico nos muestra que sus intenciones son las de cualquier buen padre que abandona el núcleo familiar: echar un último polvazo de despedida a la parienta y contaminar al hijo con sus genes aliens para llevárselo al espacio con él. Típicos problemas de custodia y luchas entre padres que se nos aparecen como algo común a todo el universo.
Por lo tanto, XTRO parece ser una radiografía descarnada y certera de la descomposición de la familia en el marco de un universo regido por las maravillas de la ciencia ficción guarra... o quizá simplemente es algo que nosotros percibimos y que para nada tiene que ver con el mensaje de la historia. El propio director de la película, Harry Bromley Davenport, en contestación a unas dudas de los fans en imdb.com, comenta así el tema:  "I have no idea.We did this film 28 years ago and I just remember that we were trying to shock people. I don't think there's anything more to it than that. There are many faults and inconsistencies throughout the film, but we were young and stupid and making a movie." Que traducido sería algo así: "No tengo ni puta idea. Rodamos la peli hace 28 años y solo recuerdo que queriamos impresionar a la peña. Hay muchas chorradas y barbaridades a lo largo del asunto, pero es que éramos jóvenes y estúpidos haciendo una peli". No importa. XTRO, más allá de las intenciones de sus creadores, es un hito de la ciencia ficción guarra y merece ser recordado como tal.  

5 comentarios:

Anónimo dijo...

de ciencia ficción he presenciado yo una escena en la calle... Un enano montado en un quad y vestido con camiseta sin mangas y gafas de sol. Me cago en la puta, parecía salido de una futuro apocalíptico a lo mad max.

Haciendo Amig@s dijo...

En XTRO también sale un enano hijoputa. Si es que lo tiene todo la peli...

ramonkarlos dijo...

Peliculón.

condemor starwalker dijo...

xtro pecadorl de la galaxia

paca dijo...

Joder! Qué pasada!