como los monos de gibraltar

jueves, 12 de agosto de 2010

Indicios del Fin del Mundo (VII)

Tragedia en tres actos.
Miércoles, 11 de agosto de 2010
18:00 PM
Lugar: Avenida de Andalucía

ACTO I
Otro lugar mágico. Una larga avenida, antiguamente carretera nacional, que discurre entre el Yellowstone del quinquerío que supone Orcasitas y el Yosemite de la vivienda protegida que es Villaverde Bajo.
Cae un sol de justicia que hace que reverbere el castigado asfalto del camino de baldosas amarillas que lleva, vía Despeñaperros, hacia esa Andalucía profundísima, sumergida, que tanto curro da a los reporteros de Cuatro.

De pronto, la VISIÓN: en un semáforo, a mano izquierda, vislumbro el portento. Me quedó atónito. Afónico. Atontao. Una vieja zíngara, como el súcubo aquel de "Arrástrame al infierno", con su pañuelo rojo en la cabeza y una larga melena blanquísima, argéntea, discurre entre los coches pidiendo. Hasta aquí todo normal. Pero un extraño balanceo cadencioso, un tumbao raro, mece su cuerpo como si fuera una chalupa de pescador. Como en un espectáculo de títeres, la parte posterior de su cabeza -no alcanzo a verle la cara- cabecea, como cantan Calle 13 -como si estuviera diciendo que sí/como si quisiera darme con la nariz-. Me quedo un poco pillado, entre soñador y perezoso, mientras me recuesto, indolente, en la tapicería de mi vehículo de alta gama. De pronto, un claro entre coches, una isla. Veo a la vieja de cuerpo entero. Su pierna izquierda tiene la articulación de la rodilla al revés, doblada hacia atrás, lo que hace que la zíngara parezca un pajarraco enorme. El ibis humano. La grulla de la rotonda. El horror, la bajona, el pavor. Qué ángulo. Por ahí entrarían los Perros de Tindalos bailando la conga.
Fundido en negro.

ACTO II

50 metros más allá. Siguiente semáforo. Aunque el climatizador bizonal está en confort una espesa sudorina, como una mortaja de aceite de oliva, me envuelve. Tengo las pupilas dilatadas, un ano apretadísimo por el que no entraría ni el bigote de una gamba y me tiemblan las canillas. Todo a mi alrededor me parece ominoso, sombrío, apagado, a pesar de la que está cayendo. Trato de calmar mi imaginación desbocada y los sofocos. Todo ha sido casualidad. Freaks en versión cinturón rojo de Madrid. Remake del 2010. Pronto, consigo dominarme. Mi mirada comienza de nuevo a vagar sin rumbo. Veo una joven con shortitos y zapatos de tacón fucsias. Shorts muy cortitos. Mucho tacón. Colores vivos. Cloncclonclonclonc. De pronto le veo: otro deshauciado de la vida, con pinta de haber salido de Bosnia cuando lo de los Balcanes y haber llegado ahora mismo. Un ser hecho de roña, renegrido, un dómine Cabra de la politoxicomanía...al que le falta media pierna. Concretamente se le acaba el remo a la altura de la rodilla, convetida esta en un muñón con más mierda que los palos de un gallinero. Antes de volverme loco se me cuela el pensamiento de que esa pierna parece el final de una rosca de churrería , esa porra final que todos los niños imploraban, justo donde la máquina deja caer un bolón de masa que hace que la tan codiciada fritura parezca un dildo de harina de trigo. De improviso este naúfrago de la vida me mira, y se pone a bailar mientras, como un dedo acusador, me señala con el muñonaco, mientras mueve el cucu al ritmo del politono que suena en su cabeza. Ahí ya lo flipo y a puntito estoy de subirme a la acera y pasarle por encima. Hiperventilo.

ACTO III

 Siguiente semáforo. Estoy to loco. Tanta casualidad no es posible. Por fin se me ha activado el tercer ojo. Soy el Dr. Extraño de mi barrio. Antes de que me relaje mi tercera visión: una bici pintada de blanco. Pero pintada de blanco en su totalidad: radios, frenos, cubierntas, sillín...como enharinada. Pintada a brocha gorda. A lo bestia. Aquí llegué a pensar que algún mimo de esos que se pintan el cuerpo entero, como una estatua, y se quedan ahí, paraícos, bajo la solana, se había ido a tomar algo y había dejado la bici. Me voy acercando. La bici está cuajadita de flores y tiene un cartelón en el cuadro. Paro. Bajo la ventanilla. "En memoria de XXXX. fallecido tal y cual. no te olvidamos". Aquí ya me hundí. Qué puta mierda de tarde. Pero esto qué es?Qué más me puede pasar? Arranco, salgo pitando, giro la rotonda y, de pronto, todo el cuadro que he dejado atrás regresa hacia mí. La bici queda en el centro, como si yo fuera un planeta que girara alrededor de ella, el cojo a menos diez y la puta vieja, ahí a lo lejos, pero todavía visible a la una en punto. Cuando creía que ya no podría desestabilizarme más al girar por la primera calle que se me presentó a la derecha, intentando huír de este espeluznante reloj de freaks en el que el minutero soy yo me topo con un Marco Aldany y aquí ya tuve que parar. No entiendo de sintaxis fílmica, ni de nada que tenga que ver con estructura cinematográfica pero sí sé que eso tiene que tener nombre: cuando en una película aparecen elementos desestabilizadores y angustiosos, que aunque no tienen que ver directamente con la trama son pequeñas trampitas que van desazonando al espectador para tenerle acojonado. Pues eso hizo la peluquería en mí. Eso y ver las rollizas peluqueras teñidas de rubio platino a través de la cristalera por lo que decidí salir pitando. Al entrar en el coche, para terminar de joderme la tarde, saltó el siguiente disco que llevaba y empezó a cantar sus penas el pobre Nick Drake y a punto estuve de seguir su ejemplo.

52 comentarios:

Ser infrahumano dijo...

Estáis lanzados a escribir tonterías. Me cago en vuestra puta raza.

Anónimo triste dijo...

A mí me ha gustado. Don Julito es un ser sensible y seguramente haya experimentado lo que Jung llamaba "estados de eemrgencia espiritual". Ahora, cómo interpretar esas señales es otro cantar, yo nunca he sabido, ya lo siento. Lo mismo comienza un éxodo interior por las oscura noche del alma.

A veces estas cosas encuentran un paralelismo inquietante en la realidad sensible circundante. Una vez volvía yo del parque de atracciones en coche, nos metimos por las obras de la M.30 y también experimenté lo de la oscura noche del alma.

Don Julito dijo...

Sí, puede ser eso...pero es que es mucha muerte y mutilación en apenas 100 metros, Triste...que uno viene de sus cosas, tampoco soy yo un tipo alegre, no te vayas a creer, pero, vaya, con un poquito de tono...y, zasca!, la India en tu camino, quieras o no...Tercer Mundo a saco

Anónimo dijo...

Por lo menos tendrás cristales tintados, si se acerca uno le das al botoncito y...fissssssss. Luego te pones un poco de ska guapo y arreglado.

Mar dijo...

Por qué no deshabilitas la moderación de comentarios?
Me temes?

ramonkarlos dijo...

Gñ.

Mar dijo...

Hay que ser muuuuyyyyy GÑ para poner la imagen de un menor con síndrome de Down y comentar sobre ella, te creía más inteligente

Don Julito dijo...

qué moderación de comentarios, buapo? de qué hablas? no te aburres?

Mar dijo...

Perdona contigo no comentaba

ramonkarlos dijo...

Que te pires ya, puta subnormal. Vete a Castelldefels, hazte amiga de unos panchitos, emborráchate con ellos y cruza las vías.

Mar dijo...

Eso se lo dices a tu padre

Don Julito dijo...

Y los chavales del barrio/
le llamaban loca

Mar dijo...

A tu padre?

ramonkarlos dijo...

Echo che lo diche a tu padre. Gñ.

Don Julito dijo...

No, pesadilla con tetas: A TÍ
vete ya a la mierda y muérete un ratito, da un suspirito y revienta pero por favor déjanos vivir, tronca. Estás fatal. Búscate un hobby. Vete al centro cultural de tu barrio y apúntate a pilates o a spinning o a hacer broches de miga de pan pero no vuelvas. Te lo pido desde el respeto. ERes MUY pesada, SIN gracia, y tienes más problemas que un libro de matemáticas. Vete a ver españa directo, corre.

Anónimo dijo...

Mi hobby eres tú y tu blog

Mar dijo...

Lo dices en serio anónimo?

Don Julito dijo...

Bueno...en ese caso la cosa cambia, claro...y....dices estar muy interesada por mí? vaya...y tú...cómo tienes las tetitas? de punta?

Anónimo dijo...

Este blog es de lo mejor que hay en internet y si no te gusta te vas a ver España directo

Don Julito dijo...

Sí, sí, estoy de acuerdo...pero...sabes lo que pasa? que la gente no se da cuenta y yo ahí, dale que dale, intentando hacer algo genial, elaborado y ellos no...no...no lo aprecian...sabes? jo, eres una tía superespecial

transgñññññ dijo...

¿pero por qué se empeñan en que piropos picantes es una tía si está claro que es un transgñender?

Haciendo Amig@s dijo...

Ay dios, que me va mal.

Anónimo dijo...

Llevo cotilleando este blog todo el verano y Haciendo amigos, Fansworth y Superwoobinda nunca postean. Son figuración??

Anónimo dijo...

Aplaudo y pondero a Don Julito.

Don Julito dijo...

Ya podíais ser todas las locas que entráis aquí como ésta chica: discreta, encantadora, generosa con los regalos cuando marcha de vacaciones...y tiene una amiga con tetamen y shortitos, to rubia, que parece una Luján Argüelles de San Juan...en fin, gracias, Millana

big sister watch you dijo...

Millana no atrae impersonators, otro gallo cantaría, todo este sindios de presuntas anonas es cosa del efecto paca mal entendido y del marcaje que le hace aido a ramó.

Hace años pasó algo parecido cuando una feminoide, tal vez aido preministra, se propuso desacreditar a torbe como si eso fuera posible.

Anónimo triste dijo...

Y además Millana prepara meriendas con ricas tartaletas.

Manuel Sainz dijo...

Hay que ver que cosas asaltan la mente (y el cuerpo) de don julito hasta cuando va en coche. Y con que poca verguenza las expone aquí.
De puro bien inventadas que estan parecen reales y todo.
Me ha encantado el acto II y la ilustracion del churro mojando. Hiperventilo.

Manuel Sainz dijo...

Se le pasó ya el vahido, señor Haciendo Amig@s?

Don Julito dijo...

Juro que los tres actos están basados en hechos reales y que todo esto se puede comprobar in situ en el tramo de la avda de andalucía comprendido entre la glorieta de la M-40 hasta el Mediamarkt de Vde Bajo...ahí verán, si no libran, a estos dos seres humanos y la puta bici...también está por ahí el Marco Aldany...el disco de Nick Drake lo tienes que llevar de casa

Anónimo dijo...

Reflexionando sobre lo que relataba Donju, de un tiempo a esta parte, he observado que en mi pueblo ha aparecido el concepto homelessness. Apenas utilizo ese túnel del terror que es el metro, pero bien, fue salir el otro día, y ver indigentes por todos lados, apareciendo como setas. Negros, rumanas, una amalgama de estiletes de lo más cromáticamente alegre...Reconozco que siempre he tenido debilidad por los poéticos carteles de algunos de estos galanes de comedor social, pero bien, me inquieta este nuevo fenómeno, ya que aquí nunca había visto ninguno y sus cruces de perrito aturdido por la carretera, pasan a ser obstáculo en esas prisas matutinas.

Anónimo triste dijo...

A mí me gusta mucho River Man, de Nick Drake. Ideal para pasear con la bicicleta.

Don Julito dijo...

Igual Nick se dió matarile por una cosa de estas: tal vez un aluvión de pakistaníes mutilados y menesterosos le provocó un cuqui nervioso y se pasó con los barbitúricos

Manuel Sainz dijo...

No hace falta que lo jure, Don Julito. Bien claro está que se trata de esa realidad que supera la ficcion con la que nos topamos a veces. Lo dificil es encontrar a alguien con la habilidad de relatarla tan bien y con tan poca verguenza como usted lo ha hecho. Y no es coba, ni usted la necesita ni yo tengo porque darsela.

Anónimo dijo...

Nick Drake, al no poder disfrutar del Pegamín, se pasaba las noches escuchando música y tocando la guitarra, como nuestro Anónimo Triste.

El fantasma de Nick dijo...

Que yo la palmé por culpa de la droga, coño.

Dejadme tranquilo de una puta vez, que ni muerto puedo descansar en paz.

Don Julito dijo...

No, Ninguno...si ya sé que no es coba: si me has llamado sinvergüenza por la jeró, cabronazo

Dr. Huysmans dijo...

Don Julito estás inspirado, y me estás inspirando a mi. Creo que mezclar estas experiencias con la vieja estética del fílmico Jodorovsky me puede hacer engendrar algo... raro, pero algo...

Por cierto, Anónimo triste, te agradecería si me pudiera informar en qué parte de su obra, Jung habla de los "estados de emergencia espiritual".

Anónimo triste dijo...

No sé, Dr. Huysmans, es un concepto que he leído atribuído a Jung muchas veces en fuentes secundarias.

Manuel Sainz dijo...

A los hechos me remito, don Julito: hay que tener muy poca verguenza para relatar indicios como estos y en lugar de hacer referencia a las "sensaciones del corazón" o de la cabeza (por muy loca que estuviera)como hacen los escritores al uso en estas tesituras, tu vas y nos sales por ejemplo con lo apretado que tienes "el culo por el que no entraria ni el bigote de una gamba". Un poquito de porfavor, hombre. Sinverguenza, si. Y sin hipocresia también; por eso nos gusta tanto leerte a los cabronazos como un servidor.

Anónimo dijo...

Disfruto mucho con Donju y su lírica, pero me he prohibido leerle en cafés de tinte parisino, bibliotecas, entornos profesionales varios, y cualquier emplazamiento de posible silencio sepulcral... Me da la risa tonta y parezco más gilipollas de lo normal.

Don Julito dijo...

Gracias, amigos...me hace mucha ilusión ser un tótem de lo tontarraco

:_(

Anónimo dijo...

estoy muy mal

Manuel Sainz dijo...

Y Haciendo Amig@s que no responde. Me temo que lo hayamos perdido. No me extraña, que lo que hay que ver aquí a veces es como para que le de un telele a uno.

Anónimo dijo...

Totem y referente cultural, sí: piense que le escribo desde Madrid, y vine con la única y modesta ilusión de pedir un "corto-clara" ,cuando sigo sin saber qué demonios es...

Don Julito dijo...

Venga, coño, no me lo creo...el corto clara es...es...la esencia de Madrid escanciada en un vaso...el corto de toda la vida con la refrescante, translúcida y cero calorías, gaseosa envolviendo la amarga cerveza...pero en cantidades de posguerra...un vasito que, ahora, en los sitios modernos, vuelve a resurgir...esas "cañas" de El Bonano, que no son sino cortos, cambiados de nombre y cobradas su peso en oro...si han leído la novela de Mijangos, Braille para sordos (a mí parecer muy ligada con Los millones de Lorenzo), verán que los bares madrileños siempre han sido una especie de hospital de campaña, con una oferta para gente que estaba a la cuarta pregunta, que ríete tú de las tabernas rusas de la Guerra Fría: poquita cerveza, mucho vinacho agrio, tabacazo negro o picadura y mucha casquería, a saco: entresijos, gallinejas, mollejas, hígado, sangre, callos...la tapita más barata y la ración más guarra...porque la brava, la alita y el calamar deben ser cosa de los 60 o 70, ya más recuperada la economía...reinvindico el corto (clara para las señoritas o el resacoso) en estos tiempos de economía depauperada...atrás quedan los 80 y 90, con la basca poniéndose a gusto de tercios (y de Voldamm!!!), con tapita de paella...que vuelva el corto, o el chato, y que vuelva la molleja trufada de ave trufadita de tierra, el zarajo que parece un atrapasueños mohawk, las olorosas gallinejas, los grasientos entresijos, las criadillas relucientes, los callos picantes para matar el olor a despojo, las tortillas de sesos, el hígado encebollado, la sangre con tomate....y los baretos con mucho serrín (aserrín!!!) en el suelo, los boletos con señoras en bolas, las mesas de tijera.....una posguerra, cabrones, nos hace falta a todos...y me tiráis el ipod a la basura

Anónimo triste dijo...

Un hígado encebolladito es una cosa muy de agradecer, sí señor.

Todo ese panorama gastronómico lo puede disfrutar aquí en bares como El Imperial, cerca del convento de las clarisas.

Ender dijo...

en el "do mendo" (tetuán), entre una caña y otra, pueden caerte varios platos de oreja, mollejas y mierdas así terminadas en eja (si pedís polleja fijo que también os la dan). no me gusta demasiado el bar porque está siempre petadísimo de universitarios pero es bastante barato. comes por tres o cuatro pavos.

Don Julito dijo...

Así no vas a crecer en la vida

LA BLASA dijo...

COMIENDO GALLINEJA NO LLEGARAS A VIEJA

Anónimo dijo...

Creo que fue llegar yo y morir cualquier expectativa de ocio decente en Madrid. Por un momento me vi en el Moustache's... Eso sí, anoche a las tantas me vi en una calle desierta mirando el mismo escaparate que el tal Xabi Alonso y su señora, mientras él lamía un cucurucho y hoy me he topado con Paco Marsó en la entrada del Café Gijón. Horreur.

Don Julito dijo...

Joder, parece que has llegado a Vetusta en lugar de a Madriz