como los monos de gibraltar

martes, 7 de septiembre de 2010

POSTRES PEGAMIN

21 comentarios:

Don Julito dijo...

El mundo del snack y la repostería está llenito de lujuria

Anónimo triste dijo...

Dígamelo a mí, Don Julito.

Anónimo triste dijo...

Qué daría yo ahora por una caja de cachaps de Paterna, de pestiños de Almería, o de hojaldres de Astorga. Un café con leche para mojar y es que no los ve el ojo humano.

Don Julito dijo...

Qué goloso eres, Triste, que se te va la vida en el pasillo de los bollos, coño...que te ofrecen ir a Graceland y prefieres visitar la fábrica de Reglero

Anónimo triste dijo...

Lo que a mí me gusta es combinar: primero salado, luego dulce: luego un café, fumeque y vuelta a empezar.

A Elvis también le gustaba eso y más.

Macarrismo dijo...

A mi que nunca me ha entrado hambre después del fumeteo, ni siquiera me mola comer con el sabor en la boca.

Anónimo triste dijo...

no, si yo decía tabaco. Pero con el otro fumeque sí que me entraba hambre. Hambre, sed y más cosas, me entraban.

Macarrismo dijo...

Yo es que no suelo fumar tabaco, excepto puros en BBCs y cosas asi.

Manuel Sainz dijo...

No los he probado pero la mantequilla opino que les puede dar sabor a los chochitos aunque lo que es las frutas del bosque mejor que se las meta por allí.

Tereso dijo...

A mi este humor gráfico hiperrrealista gustarme mucho.

Anónimo triste dijo...

Por cierto, que esto de los chochos de mantequilla me recuerda mucho a una portada de un vinilo jevi que tenía mi hermano, un lp en el que aparecían una especie de donuts o rosquillas azucaradas, en plan metáfora sexual chusca. No recuerdo el grupo pero era uno de los grandes.

Goloso dijo...

Milana y Clementina si que deben de ternerlos dulces como la miel. Ummmm.

bibi ana dijo...

sssserdo

Licenciado Vidrioso dijo...

La sabidurida popular dice: desde que se inventaron la cámara frigorífica y el bidé, ni los jamones saben a jamón ni los coños a coño.

Anónimo dijo...

¿Y quién usa hoy el bidé?

Confessions of a pussy eater dijo...

Tu madre casualmente lo contaba ayer en la pulpería de la esquina.

Anónimo dijo...

El bidé de mi madre vale más que tu vida.

anónimo sinónimo dijo...

By the way el último comentario, ¿qué pasa con las sentencias pegamitas? qué abandono, qué incuria, que molicie, qué indolencia

chocho y medio de follini dijo...

suscribo

Anónimo dijo...

Sí, y sin el Efecto Paca, ni los mecagoen de 77, que hace todo más triste.

ironicus dijo...

eso, más triste, qué jodío