como los monos de gibraltar

domingo, 10 de octubre de 2010

“¡SUBNORMALES DE MIERDA!”, DECÍA MIENTRAS LLORABA.

Cuando era pequeña, mis padres bajaban a la cervecería de Estrella Galicia y yo me pasaba las noches de fin de semana en “el pasadizo”, un extraño espacio urbano que había al lado, como si fuera una plaza de cuatro niveles en forma de calle y rodeada de edificios de diecipico pisos. Yo era la más pequeña de todos aquellos niños que nos hinchábamos a jugar mientras nuestros padres se alcoholizaban socialmente. Digamos que, aproximadamente, cuando yo tenía siete u ocho el mayor tenía catorce. El mayor, el jerarca de la pandilla, se llamaba Julito, casualidades de la vida, y era hijo de un policía que se soñaba tejano, fiel a su style de chupa de cuero tostada y gafas de cop, facha, racista, con la pipa a flor de piel. Levantaba polvo a su paso.

puto negro

El chaval era alto, bien parecido y muy violento. Aquello no era una gerontocracia, sino que llegó al poder a base de golpes de Estado crónicos. Cada cierto tiempo le partía la cara a algún chaval de la pandilla consolidándose como líder indiscutible, ofreciéndonos el excitante visionado de un festín de ultraviolencia.

los amigos

Casualidades de la vida, se decía que me gustaba. Mi familia ya nos emparejaba.

Cuando se elegían los equipos para jugar, siempre me escogían de última ya que, debido a mi edad, poseía inferiores capacidades deportivas. El juego del pañuelo era una tortura para mí. Comenzó aquí mi problemática para relacionarme socialmente, ese sentirse rara. ¿Cuál sería el detonante? ¿Fue antes el huevo o la gallina? Siempre he sido una niña muy sociable, pero también una niña rallada, por cuyo pensamiento obsesivo circulaba la idea de no gustarle a los demás. La preocupación, mi losa.

ains

Ana me recluyó para alimentar su ego. Era una niña mayor, muy guapa, alta, desarrollada, morenaza con cara de ratita que quería una fan. Así que me acaparaba y me llevaba con ella a dar las míticas “vueltas a la manzana” (“Tienes que dar cinco vueltas a la manzana”, “No vale dar la vuelta a la manzana”, “Mamá, ¿puedo dar una vuelta a la manzana?”). En estos femeninos paseos me hablaba de su vida de chicos y ligues, ficción inspirada en el consultorio de la Super Pop. Me contaba cosas cerdas, de morrear, de rodillazos en el coño... Me explicó lo de la regla y yo llegué a casa hablándole a mi madre de la raya o la recta. Me dijo que una niña de su clase se sacó el himen y se lo enseñó al profesor. Con ella vi mi primera peli porno, por ahí por los ocho años. Se la había descubierto a su padre, un agitanao que iba siempre en chándal, pelo relamido y pitillo colgando del labio. Se llamaba “Culitos cremosos” (la peli, no el padre) y yo me quedé clavada en ese sofá incapaz de levantarme, como si mi toto hubiera hecho ventosa en él, con un hormigueo que hasta me dolía.

Otro paso más que me alejaba de la manada.

Me fui a vivir a Miami y, cuando volví, tenía un acento cubano que avivó las mofas de los niños, que me echaban la culpa, “¿ésta de qué coño va?”.

corrupción en Miami

Los juegos se fueron extinguiendo y la costumbre iba siendo hablar sentados en los portales. Las conversaciones que Julito orquestaba se convertían en divertimentos de indirectas que me caían como crochets verbales.

eres tonto, ¡toma!

Yo hacía que no iba conmigo, mirando al infinito, haciendo fuerza con la garganta para que no estallasen mis llorosos ojos. Pensaba que tenía que ser fuerte cosa que, a día de hoy, no he conseguido ni un poquito.

Bajar al pasadizo era ya una tortura. La opción para mí era quedarme dentro, con mis padres, triste, avergonzada, con miedo a salir, con miedo a encontrarme a mis amigos. Entonces mi madre me decía: “¿Pero por qué no sales, mujer?”, y yo le decía que me dejara en ¡¡¡paaaaaaz!!!. La figura de mi madre fue crucial en este asunto. Intentó bajarme por otro lado para que hiciera otras amigas, pero no me sentía cómoda con este grupo tampoco, así que mi mamita querida me decía que a lo mejor el problema lo tenía yo, no los demás, que pensase en ello. Gracias, mamá.

Y como colofón final, en el cole de monjas, donde fui de las guays, empezaron a odiarme por salir, follar, leer y escuchar música y me fui convirtiendo también en una outsider.

He ahí la gestación infantil de este trauma, afianzado por mi primer novio, por el cual abandoné a las amigas de los albores de mi adolescencia y que me decía que iba a acabar sola en la vida y que la gente no me quería.

pero niña...

Y es por ello que, cuando me vilipendiais, queridos fans, aún consciente de mi superioridad, mi cerebro hace un click freudiano y siento dolor.

75 comentarios:

priest dijo...

...y el tiempo te dió la razón.

priest dijo...

Esta mujer es una maravilla.

LA PERTURBACIÓN dijo...

Y además lo habrás escrito con el coño cremoso,qué maravilla, qué virtuosismo, qué música sacra !!!!

Ramó, angelico...entra en el pasadizo

qué alaridos pega el pobrecico...

Tereso en Pijama dijo...

Clemen, los fans no te vilipendian, son los anónimos (algunos) y Ramón, pero ellos no son fans tuyos, creo que quizás ahí puede estar la raíz de ese trauma que acarreas.

Julito, contesta el teléfono del amor, digo sexo.

Don Julito dijo...

Hola Clemen...me alegra que hayas escrito, me molan tus cosas...yo quiero hacer un inciso sobre este tipo de comportamientos: creo que es muy común sentirse el raro en cuanto te sales un poco de la colmena pero abundar en ello, entregarse a la rareza o, como tú dices, obsesionarse con la diferencia, eso, digo, es lo jodido de verdad...creo...el que más y el que menos ha pasado por eso, el secreto de que eso no sea uno de los pilares básicos de la personalidad es no hacerse mucho caso a uno mismo: uno sabe quién es, qué quiere o, al menos, sabe que no es como los demás ni quiere lo que ellos pero no es aconsejable medirse con rasero ajeno, porque, coño, claro, se hunde....en fin, que güay

ahora el palito:

el de la foto, con pinta de narco de sinaloa fan de los niños desnudos...es familia tuya? lo digo desde el respeto, como dicen en la tele...es que tiene un look...extremo

Anónimo dijo...

Julito accede a follar,jincatela YA
que esto es un sindiós...

Tienes a la chica haciendo clicks freudianos en bucle, más la presión
de Ramó el disidente y los anónimos que la vilipendian. La nena acabará con el culo torcido y picueta perdida.
Ya ves que metáforas se casca de chicos gamberros, su cerebro no podrá aguantar más este attention whorismo al que se ve abocada, que esto ya huele a churrasco.

Dale longaniza a Clementina, Julito.

Sopa de Amor dijo...

Clemen ¿pero al final te follaste a tu padre o no?

Ender dijo...

clementina, siento la empatía corriendo a toda hostia por mis venas

El Vaquilla dijo...

Qué drama humano, oigan. De niña a mujer, bueno a putilla, pasando miles de aventuras dickensianas, como ver una peli porno, o hablar con acento raro.
Qué nuevas aventuras fascinantes nos deparará la vida al límite de este entrañable personaje?

Anónimo dijo...

gua, güe, güi, guo.

paca dijo...

Me ha encantado Ms. Clementina. El momento Pergolesi me ha conquistado veramente.

Siguiendo con lo dicho por Don Julito, Entregarse a la rareza debe ser como una especie de mística personal. Enajenada y separada del discurrir práctico de la vida.

Antes de comprender eso se pasa realmente muy mal.

Xabibenputa dijo...

Estoy de acuerdo con lo q dice Julito. Y me ha gustado el post. Me ha gustado ademas que no hayas adornado nada.

Me he sentido...glups...identificado!!

Xabibenputa dijo...

Por otra parte, y pese a haber estado en el otro lado de la ventanilla (de cobro), quisiera significarme por Julito, el alfa.

Porque nadie sabe lo jodido que es ser el leader of the pack, aunque todo parezca dar hostias, aterrorizar y crear traumas, el liderazgo es una losa pesada.

Que acaba destruyendo. No hace falta mas que ver como acaban todos los lideres de pandilla infantil/juvenil al hacerse mayores...

se renueva el santoral dijo...

grace ha muerto, viva clementina

Popotitos dijo...

Qué verguenza ajena

bakerisso st dijo...

clementina... de miami, vente conmigo a las vegas y te haré felissssss, conmigo sacarás el hombre que hay en ti

y ahora... uno, dos, tres, cuatro, cincuenta ardominali en tu honorl

Anónimo dijo...

Yo no me he sentido identificada y el post me ha gustado mucho. Clementina es muy querible, yo ya se lo dije via formspring.
A mi los niños pegones y camorristas me han dado siempre mucha lástima, porque veo lo que hay detrás.

Yo fui una de ellas, mi especialidad era morder. Pero mi hermana era peor, en quinto de la EGB le pillaron con un cuchillo jamonero escondido en el camal del pantalón. Quería amenazar con el a su profesor. No le dio tiempo, el pantalón se le rajó al sentarse ene pupitre y le pillaron.

Pero estamos las dos rehabilitadas.

Anónimo dijo...

Qué personaje estará más colgado?

Clementina. dijo...

Mis haters son mis fans, son lo mismo. Son esos fans cuya desmesudarada adoración se convierte en rabia. Como buena cristiana yo sí los quiero a ellos.

Julito, el hombre de la foto es un primo de mi madre. Un auténtico showman latino, que se fue a vivir a California y vivía de extraños timos legales radiofónicos. Su mujer tenía un consultorio "médico" y vendían pastillas, o algo así. Tuvo muchos business. Con esa sonrisa latina... un crack. Descansa en paz, primo.

Don Julito dijo...

Millana, los niños que muerden están faltos de atención

xabi, qué cabronazo eres

clemen, un auténtico look de miami...por cierto, tú que lo conoces...por qué todo el mundo se empeña en decir inexactitudes y maldades sobre Miami: que si es fea, que si es hortera...y yo creo que es una ciudad muy bonita...como, por otra parte, lo son casi todas las grandes ciudades de los USA: suelen tener muchos parques, una arquitectura muy bonita....es complejo europeo?

Popi girl dijo...

Dios mío, con esa infancia atormentada podías haber acabado siendo emo. Menos mal que te arrimaste a las mariconas modernas y has devenido en una fascinante mariladilla petardilla.
Brillante estrategia, amigos pegamines, para entrar en el estrellato pop de la maricosfera, ya sabéis, la mafia rosa y eso. Eso sí, soltad el lastre de Ramón, es demasiado suyo como para soportar el arduo trabajo de lameculeo que os espera. De momento vais bien, lo de "me siento identificado" da bola extra.
Ánimo y limpiaros las boceras después del lameteo, que la etiqueta es la etiqueta, y ahora más que nunca.

Anónimo dijo...

Miami es lo másssss

Don Julito dijo...

Vuelvo a repetir:

cree el ladrón, y el maricón, que todos son de su condición

aquí no queremos nada, somos los putos franciscanos de internet y todo lo hacemos por analfabetos virtuales como tú

Anónimo dijo...

webaaaaah

Clementina. dijo...

De infancia atormentada nada, yo he nacido en cuna de oro. En cambio tú, con ese odio interno...
Cuánto sabes de maricones y mariladillas, que les llamas, ¿también te causan fascinación y atracción fatal?

Anónimo dijo...

Comentó guay (güay)

paca dijo...

Franciscanos...? Jajajajajajajajaja
Me da que nos ajustamos mas a los Dominicos decadentes del s. xiv

el nombre de la rosa socrática dijo...

sor paca la inquisitriz

Clementina. dijo...

No es ni fea ni bella, es ambas cosas. En su fealdad está su belleza y en su belleza su fealdad. Paradigma de lo USA, para bien y para mal. No se puede medir con rasero europeo, claro. Es una ciudad cruel, pero hay tantas chucherías...

Macarrismo dijo...

Yo había leido que tiene una arquitectura art deco muy bonita.
Por otra parte, cuando vi a tu primo segundo inmediatamente pensé en alguno de los simpaticos colegas de Tony Montana.

Látigo de tres puntas dijo...

Clementina, que no te odiamos a ti, odiamos lo que representas, sea lo que sea eso.

Tereso dijo...

Paca, ud. de Cluny.

Clementina. dijo...

Exactamente Macarrismo, el Kike Eiroa.

Odiais a Hipatia, a Juana de Arco, a Rosa Luxemburgo, a Valentina Tereshkova...

Anónimo dijo...

pero si tú te pareces más bien al Golosinas...

Anónimo dijo...

en la actitud, entiéndeme, en la actitud

ramonkarlos dijo...

¿Qué es esto? ¿Lloramin 2000? Vaya fichaje has hecho, Julito. Ya sé que no vas a entender la referencia futbolera, pero te han colado un Spasic. Bueno, te lo has colado tú mismo.

Xabibenputa dijo...

Jajjajaja!!

el acagose dijo...

mejor un spastic colon

Don Julito dijo...

hombre, a un paquete como spasic hasta yo le conozco...anda, Ramón, vuelve, que todos somos necesarios en Pegamin 2000, hasta los Romario como tú

Anónimo vilipendiador dijo...

¿Superioridad?

Deja de ponerte de puntillas y no te subas a ningún sitio que te puedes descalabrar.

Noticia del día dijo...

Ya basta de bromas, eh, ya basta.

ramonkarlos dijo...

La noticia del día, del mes y del año. Jajajaja!!!!!!!! El abogado Felipe Orviz, de 30 años, exige impedir que los ayuntamientos contraten con dinero publico cuadrillas de bomberos-toreros.

ÑG dijo...

GÑ!!!!!!!!!

Haciendo Amig@s dijo...

Esto no da ni para paja.

priest dijo...

La iba a poner como post pero me ha dado pereza. La foto es cojonuda, también.

Elvis Popy dijo...

77, les han colado un Popy-anal, que es como un enema pero al revés, en vez de sacar la mierda la mete dentro. Pero bueno, que aproveche

paca dijo...

Sr. Tereso, de haber sido católica de cuna, creo que mi rollo habrían sido los Jesuitas. De un modo retorcido eso sí. Aún más retorcido que ellos mismos.

ramonkarlos dijo...

Qué gran símil, Elvis. Eso es Clementina, un enema de mierda.

Anónimo dijo...

estimada paca, los jesuitas acaban de galardonar a un colega suyo en cuna y gustos, don jerónimo saavedra, no ceje, y piense en profesar, así daría más empaque a su vocación docente

Anónimo dijo...

A quién han violado??

contreras, que no te enteras dijo...

a ti, tontín

Anónimo dijo...

Nunca he ido a un colegio de jesuitas

paca dijo...

"'Vocación docente'-dice-... ". El Sr. Saavedra es de las Palmas de Gran Canaria.

Anónimo dijo...

Y??

Juan Pedro Ayllón dijo...

Estoy conmovido mi ya querida clementina... agradezco ese retrato sincero, su desnudez a la hora de plantear su niñez y su ración de inhumanidad comida a regañadientes como un plato frio de acelgas. Ve como no hacía falta postear tetas y pollas para ganarse al personal? ahora cuando la vea asomar la patita, le dará una ración extra de endorfinas a mi pobre alma.

Su más sincero admirador

Anónimo dijo...

PELOOTAS!!!!

Juan Pedro Ayllón dijo...

Eso es lo que dice tu reputísima madre cuando las ve rebotar cerca del ojete.

Anónimo dijo...

Mi madre al contrario que tu reputísima madre SOLAMENTE ve rebotar las de mi padre.

Franelo dijo...

A tu viejo le cortaron las pelotas nada más naciste por higiene genetica, subnormal.

Juan Pedro Ayllón dijo...

Y tus padres son hermanos.

Anónimo dijo...

Te has confundido las pelotas se las cortaron al TUYO.

Juan Pedro Ayllón dijo...

Si hubieras separado la frase con un punto, te hubiera quedado una réplica perfecta sin lugar a una contra. Si hubiera sido un punto y coma, habría una mueca de admiración en mi cara, y te hubiera enviado petazetas por seur. Si hubiera sido una coma, hubiera habido una colleja de reprobación... Sin puntuación alguna, me limpiaré la chorra con tus ensaimadas del desayuno.

Anónimo dijo...

Habló el que pone gue en vez de güe

Anónimo dijo...

Pues enseñale dicción a la mongólica de tu madre.

Anónimo dijo...

Educación-0

Mi madre al contrario que la tuya no necesita dicción.

Logopeda-man dijo...

Por su puesto que no necesita dicción. Hacerse entender cuando ha habido pollas que le han llegado al píloro es admirable... una woman-self-made como dicen en los USA.

Anónimo dijo...

Que no te enteras que lo único que le ha llegado a mi madre(al contrario que a la tuya) es lo que le ha dado mi padre.

Juan Pedro Ayllón dijo...

jajajaja, que criaturica más encantadora.

Anónimo dijo...

Gracias

anónimo funeral dijo...

coño, que el corpse de clementina aún está caliente,,, un poco de decoro y menos guirigayer

Anónimo dijo...

Decoro es lo que hay.

castratin dijo...

chicos del coro, que es otra cosa

Anónimo dijo...

Del coro salvaje

florence ziegfield dijo...

iros a hacer gárgaras, coruslainers, que sois unos coruslainers

Anónimo dijo...

Lo único que hace falta para que los hombres descubran el amor es tener demasiado cerca a una mujer; y lo único que hace falta para que este amor se disipe es seguir teniéndola demasiado cerca.