Que la mujer, sobre todo si es una jaca impresionante, tiende a convertirse en entidad peligrosa y amenazante en la ciencia ficción guarra es algo que podemos intuir en lo que llevamos visto hasta ahora. Pero quizá la película que ha expresado este concepto de la hembra como hijaputa del mal cósmico, de la forma más preclara y literal, sea Species (Especie Mortal, 1995).
Unos científicos captan un mensaje extraterrestre con sus radiotelescopios. Parece que los aliens son buena gente y envían datos útiles para mejorar la vida de la raza humana. Uno de esos datos resulta ser una cadena de ADN misteriosa. Los muy ilusos piensan que puede ser la clave para curar todas las enfermedades. Inoculan el ADN alienígena en unos embriones in vitro y logran que uno de ellos crezca hasta convertirse en una preciosa niñita rubia que se desarrolla aceleradamente y recibe el nombre de Sil. Pero la criatura comienza a hacer cosas raras al llegar a la adolescencia, como todas las niñas, y deciden liquidarla. Sil se escapa y, cual linda mariposa, se forma un capullo y sale de él convertida en un pedazo de mujer despampanante con un único objetivo en la vida: reproducirse con un macho humano para engendrar una prole de monstruitos folladores demoniacos capaces de exterminar la humanidad en un suspiro.
Un grupo de "expertos" reunido por el gobierno, tratará de capturar a la folladora galáctica para evitar la hacatombe reproductiva. Lo que sigue es una caza de la guarra por discotecas de Los Ángeles y casas de infortunados solteros ligones que son asesinados por la Sil por cualquier tontería. Que si el macho en cuestión es diabético, y por tanto no apto para procrear; que si la interrumpen en pleno asunto... Y es que el macho, si no sirve para lo que tiene que servir, es desechable. Una lógica estremecedora y familiar rige los actos de Sil.
Hazme lo que quieras, hija de puta. Ya todo me da igual.
Como podrán apreciar la cosa tiene un cierto tufillo misógino, que da lugar a situaciones hilarantes y certeras en su apreciación de los entresijos de la cópula y de los ritos sociales que la acompañan. Momentos gloriosos son, por ejemplo, el diálogo con el científico al mando: "Elegimos a una hembra porque son más dóciles", dice el cerebrito. El personaje interpretado por Michael Madsen, un curtido y varonil asesino a sueldo, se descojona de risa al escuchar la frase y contesta: "Se ve que usted no sale mucho". Otro hito es cuando Sil, después de seleccionar en la disco a un macho follable, se cabrea al ver que una guarrilla se lo quiere quitar. Cuando su rival se va al baño, Sil la sigue con malas intenciones. La guarilla le dice "En el amor todo vale". Sil la mata mientras está sentada en el retrete, Efectivamente, vivimos en un mundo de relaciones despiadadas. El momento cumbre es cuando Sil, desesperada por un coito, seduce a uno de los científicos del grupo, un salido interpretado por Alfred Molina, frustrado por no ligar en la disco por feo y por pringado, y se lo folla justo al lado de la habitación donde Michael Madsen está fornicando con la única científica del equipo. Se desprende de todo ello una moraleja inquietante, un aviso al macho beta insensato que pretende triunfar en el terreno amatario cual macho alfa. Su destino es ser devorado por alguna depredadora despiadada que lo que busca es quedar preñada a toda costa. Por decir algo, porque las metáforas y simblismos de la ciencia ficción guarra siempre resultan confusos y dan pie a diversas interpretaciones. Nos movemos en un terreno farragoso, donde uno siempre tiene la sospecha de que detrás de estas historias se oculta un ser humano que ha follado poco y alberga cierto resentimiento hacia el género femenino en particular y la raza humana en general. Quién no.
Pero destacar que al sevicio de esta fábula extraña sobre los peligros del frenesí follador tenemos un reparto impresionante, con figuras como Ben Kingsley, Forest Whitaker y los antes citados, todos ellos eclipsados por la bella Natasha Henstridge, antigua modelo que borda el papel de fémina despiadada con un único objetivo sexual en su existencia. Y todo adornado con diseños de H. R. Giger, que incluso puso dinero de su propio bolsillo para poder rodar unas breves escenas de pesadillas eróticas alienígenas que padece Sil a lo largo de la película.
Esta apoteosis de lo fantacientífico cochino generó tres secuelas más directas a vídeo que no he podido disfrutar aún, pero que demuestran sin duda que la ciencia ficción guarra es el instrumento perfecto para adentrarnos en las complejidades del cortejo y apareamiento humano. La otra opción es salir a la discoteca y correr el riesgo de ser violado por un ser de otros mundos. Ustedes verán lo que hacen.
13 comentarios:
Las he visto todas, a cada cual peor. Sin duda la que nos comenta usted es la mejor.
Esto que dice de la misoginia; en la ciencia ficción guarra, claramente. Pero es que está en el drama artístico'... en las pelis disney... hijo hasta en el discovery channel. Se podría hacer un meta-análisis cultural sobre la cuestión usando los ejemplos de esta su serie de despierta crítica cinematográfica.
He de decirle que siento una especial fascinación por el personaje de Sil. Se puede reinterpretar, no como mal cósmico sino como heraldo (Al igual que todas esas grandes malvadas del genero fantástico, la ficción científica y el terror) de un nuevo orden, no podemos olvidar que la misoginia es, hegelianamente hablando, pura dialéctica del terror atávico que las mujeres les causan a la práctica totalidad de los hombres.
Queremos que nos llenes de hijos Paca.
La de veces que han puesto esta película en la tele...
¿El Forest Whitaker no os da un poco de mal rollo? Siempre con ese ojo a la virulé y unos gestos como de estar pasándolo muy mal, como de embolia cerebral inminente.
Paca con acaldar la alcatifa tiene bastante
Claro querida, sería muy rudo por mi parte dejar que te enfriases.
Paca, la de la alcatifa eres tu....
eso de acaldar la alcatifa suena a oficios para el recuerdo
Depende de cómo tú lo quieras entender
Forest Whitaker da muy mal rollo y además tiene pinta de oler mal o al menos raro.
Seremos grandes
Seremos fuertes
Somos un pueblo ante la gente
vaaaa
Que viene y que va
Que viene y que va
Que viene y que va
Que viene y que...
La alcatifa 1500 euros
El calor corporal suficiente para entibiarla, 80-90 kcal unos 8 euros de filete con papas
El anónimo inconstante 0,5 o así
Sacudirle el polvo de su insulsa vida, no tiene precio...
Para todo lo demás, el sacude colchones....
Mejor que la mastercard y la visa oro tías...
Danos vida, danos fuego, que nos lleve a lo alto,
campeones o vencidos, pero unidos a intentarlo,
Todos los anónimos somos inconstantes, vitales.
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