Sí, yo a Iniesta le veo mucho de la hondura española, de la hondura sensible, se entiende. Le veo perfectamente interpretando a un Miguel Hernández, con los ojillos tiernos acariciando sus primeros poemas, entre el romero del monte.
Bufff vivo en el infierno, esta oleada de idocia futbolera como uña encarnada en el dedo del españolismo me afiebra. Me hunde en la más atroz de las nauseas políticas.
Toda una sociedad civil... o algo que se le parece. Pinchando sus pústulas de indignidad, su mierda... vía éxito deportivo.
Definitivamente entristece la pobreza de esta ficción. Dice mucho... Los deportes y los deportistas están bien, constituyen una narración posible, una forma de dramatizar el éxito, la superación de barreras...
Pero cual es el sentido cultural de esta potenciación exacerbada del deporte como evento cohesionador. Cual es el sentido, el mensaje simbólico que se pergeña en la comunión de todos los santos deportivos en que se está transformando el deporte español. Me escama profundamente que nuestra diplomacia esté utilizando, como lo hace, al deporte español. Es la enésima reedición del despotismo romano. A la unidad a través del metarelato glorificante. ES PERTURBADOR.
Claro, a las gentes les entra bien esta épica última del deporte. ¿Qué otro acontecimiento puede igualarla hoy en día? ¿Una bomba terrorista?
Veía el otro día la serie Spartacus y me acordaba de la película 300 y me acordaba de esa glorificación de los futbolistas. Y resulta que ayer los futbolistas imitaron en la celebración el grito de guerra de Leónidas. "¿Qué somos? ¡Espartanoss!". Estas cosas a los chavalitos de 15 años de Móstoles o de España entera les pone a mil.
Y eso seguro que no lo vio usted, Paca, que si llega a ver eso de los espartanos se le cae el refajo del sofocón. Por no hablar de las retransmiones de los goles en Onda Cero radio.
Pues no creo, triste, querida. Sobretodo porque soy una mujer liberada, solo llevo refajo cuando la ocasión es propicia. A mí es que la épica con doble fondo me lleva por el camino de la amargura. Tenga en cuenta que no es por el doble fondo, sino por su negación. Por el desmedido interés en naturalizar lo que es pura factura.
Por cierto, Don Diego, que "Pelotas y más bolas (así me gusta jugar)" hubiese sido un mucho mejor himno que ese otro de Shakira, el waka waka, que más que un idioma africano parece que está usando un lenguaje prehumano, de simios o de impedidos intelectuales.
36 comentarios:
El pulpo en la otra
Y parecía tonto el pulpo XD
La portada de Google.....
Pasaremos a la historia?
Holanda está jugando muy bien
¡HOY FOLLAMOS SEGURO!¡A LA CALLE A MONTARLA!
Jajajaja que sabio haciendo amigos.
El siguiente peligro es la cthulhu nation
Hey Felicidades Pegamines ¡España campeon!!
Hey Felicidades Pegamines ¡España campeon!!
Lo más bonito el beso de Iker a Sara
Diego, España es de género femenino, sería "campeona". Pero bueno, estamos en Pegamín...
joer!! CAMPEONA ESPAÑA!!! contento che??
Me he imaginado fingiendo euforia en las calles para echar un triste polvo y no me he sentido más sucio en la vida, de verdad que os lo digo.
Y yo que pasaba por aquí que siempre se está de fiesta.
La que nos espera... qué semanita me aguarda...
Relájate, tómatelo con calma, un buen masaje y ..........
¡Yo soy subnormal, subnormal, subnormal! ¡Gñ!
Jajajajajajajajajaja
SOMOS LOS MEJORES DEL MUNDO
¡GÑ!
En fin ¬¬
GRACIAS DIEGO,eres el único coherente en este blog
Iniesta, queremos un hijo tuyo!
De Iniesta...no me jodas, si parece un descarte de Libertarias...que te crees que va a estar en el tentiseis, pegando tiros con la boina puesta
Sí, yo a Iniesta le veo mucho de la hondura española, de la hondura sensible, se entiende. Le veo perfectamente interpretando a un Miguel Hernández, con los ojillos tiernos acariciando sus primeros poemas, entre el romero del monte.
A mi me pone Capdevila...
A mi Iniesta me da bajona, con esa cara de buenas intenciones y esa estatura...
Puyol debe ser guarro guarro, con esa potencia y esa sobriedad de la terra.
Pujol es como el Fortu, el cantante de Obus...cuando le veo correr en mi cabeza suena "Deprisa, chico de la gran ciudad"
Os he dicho que odio el futbol, los futbolistas y los fans del futbol? pero mogollón
Bufff vivo en el infierno, esta oleada de idocia futbolera como uña encarnada en el dedo del españolismo me afiebra. Me hunde en la más atroz de las nauseas políticas.
Toda una sociedad civil... o algo que se le parece. Pinchando sus pústulas de indignidad, su mierda... vía éxito deportivo.
Definitivamente entristece la pobreza de esta ficción. Dice mucho... Los deportes y los deportistas están bien, constituyen una narración posible, una forma de dramatizar el éxito, la superación de barreras...
Pero cual es el sentido cultural de esta potenciación exacerbada del deporte como evento cohesionador. Cual es el sentido, el mensaje simbólico que se pergeña en la comunión de todos los santos deportivos en que se está transformando el deporte español.
Me escama profundamente que nuestra diplomacia esté utilizando, como lo hace, al deporte español. Es la enésima reedición del despotismo romano.
A la unidad a través del metarelato glorificante.
ES PERTURBADOR.
Claro, a las gentes les entra bien esta épica última del deporte. ¿Qué otro acontecimiento puede igualarla hoy en día? ¿Una bomba terrorista?
Veía el otro día la serie Spartacus y me acordaba de la película 300 y me acordaba de esa glorificación de los futbolistas. Y resulta que ayer los futbolistas imitaron en la celebración el grito de guerra de Leónidas. "¿Qué somos? ¡Espartanoss!". Estas cosas a los chavalitos de 15 años de Móstoles o de España entera les pone a mil.
Y eso seguro que no lo vio usted, Paca, que si llega a ver eso de los espartanos se le cae el refajo del sofocón. Por no hablar de las retransmiones de los goles en Onda Cero radio.
Pues no creo, triste, querida. Sobretodo porque soy una mujer liberada, solo llevo refajo cuando la ocasión es propicia.
A mí es que la épica con doble fondo me lleva por el camino de la amargura. Tenga en cuenta que no es por el doble fondo, sino por su negación. Por el desmedido interés en naturalizar lo que es pura factura.
¿por que odiar el fútbol?
No me refería yo a un sofocón como los que le entran a Julito cuando va en moto, precisamente, sino más bien todo lo contrario...
Por cierto, Don Diego, que "Pelotas y más bolas (así me gusta jugar)" hubiese sido un mucho mejor himno que ese otro de Shakira, el waka waka, que más que un idioma africano parece que está usando un lenguaje prehumano, de simios o de impedidos intelectuales.
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