como los monos de gibraltar

martes, 10 de abril de 2012

Pegamin te escucha (VIII)

Cuándo: está pasando
Dónde: infierno periurbano digno del peor Ballard
Coordenadas exactas: en el piso de arriba o el de al lado
Quién: Un hombre joven con marcado acento coruño a una mujer, presumiblemente su novia o concubina.
Qué: Tras repetidos ruidos de impacto, cristal roto, varios gritos y un par de carreras.
"Pero mecagoendiós chorba no ves la que armaste!!" ininteligible "morto claro que está joder! pero mira que ñapa!!" barullo, carreras "está la sala toda prea" murmullos "está ¿desbirriao? por toda la cocina" voz femenina "xa o sei pero e agora que facemos, volta a limpiar cajonacona"
...
silencio largo
...

Grito del hombre "¡¡cagonocristo que non está morto!!"

Carreras apresuradas, golpes secos, fin.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Nunca entenderé los palos

paca dijo...

En serio?
Los demás vecinos son el colmo de la discreción, no?

Un sacrificio ritual pifiado?

Macarrismo dijo...

Son gallegos Paca, ni ver ni oir ni hablar.
Yo me inclino por las opciones eutanasia forzada para el abuelo, matar algún animal para la cena o bestialismo puro y duro.

Claro que prefiero no indagar.

El último dijo...

Dais tanta pena que ya ni los anonimos vienen a defecar a este rincon.

Anónimo dijo...

¡No al aborto casero!

Ese feto que sale disparado del vientre de su madre y se desliza, viscoso e incontrolado, por las baldosas de toda la casa.