como los monos de gibraltar

lunes, 28 de febrero de 2011


"Por qué todo el mundo usa la palabra maricon alegremente?un despectivo de homosexual se tiene que convertir en insulto?pues por mi parte digo que viva el rollo bollo y la libertad"

sábado, 26 de febrero de 2011

JUN TOGAWA

Jun Togawa es una de esas figuras malditas del ignoto synthpop nipón de los 80. Sus inicios en la farándula fueron como actriz de TV, compartiendo elenco con un Kitano todavia por descubrir y desfigurar. Tambien fue la imagen corporativa de una marca de WC mecanizados con chorritos llamada TOTO, para la que llegó a hacer un anuncio con el mismísimo Seijun Suzuki, el que se encontraba en sus épocas de decadencia, tras ser vetado de los estudios debido a su insurrección a la hora de ceñirse a un cine de yakuzas convencional.


Gracias a que poseía capacidades para conseguir registros vocales mutantes equiparables a los de Nina Hagen, y a que era una Vamp musical, que se codeaba con los círculos artys, sabiendo bien a quien parapetarse, cual Lydia Lunch, consiguió la oportunidad de granjearse una carrera como artista musical en la emergente y seminal escena electrónica underground de el sol naciente. A partir de ahi ella se formó una personalidad en la que adoptaba el papel de ser una especie de anti-idol, una suerte de parodia de las cantantes mainstream j-pop, aquellas con estéticas pijillas preocupadas por poner caritas de comer pollas y de las polifacéticas starlettes con pintas de putillas punkillas New Wave sacadas del molde de Cindy Lauper.

En el 82 inicia oficialmente su carrera musical, o mejor dicho lo hace Guernica, su grupo, fichando por YEN Records. Un sello independiente recién inaugurado, el cual fue fundado por Haruomi Hosono y Yukihiro Takahashi, dos antiguos gurús del Psych Rock nipón, a la par que exs de la YMO en sus épocas doradas. Ambos venían de la experimentación con los sonidos sintéticos y pretendían hacer un sello donde albergar este tipo de estilos. Creando así una especie de alternativa a Alpha, el sello que amparaba a la YMO, los que, sea dicho, también editaron alguna cosita con YEN antes de su parón para hacer las Américas. Irónicamente, tras la quiebra del sello en el 85, fue precisamente Alpha quien los absorbió, adquiriendo los derechos, que posteriormente, al convertirse en subsello de Toshiba EMI, en los 90, se dedicarían explotar a base de reediciones. YEN contaba en su filas con gente como Hajime Tachibana, el guitarrista de aquella acojonante bicefalia entre los B-52's y los Devo que eran los Plastics, ademas de parte responsable del auge Shibuya Kei con su disco Bambi. También rondaba por allí la devoradora de hombres Sheena, que haría sus experimentos con la música electrónica en solitario dejando aparcados las venas punk-rockers con los Rokkets. Ademas de varios artistas que en su mayoría habían pertenecido al colectivo de la YMO, moviéndose por esos mismos derroteros de synth-pop, avant-garde y clásica moderna. Entre ellos estaba Masao Himura y Fumio Ichimura, cabezas visibles de Testpatter, que también llevaron a cabo otro proyecto, en este caso llamado Apogee & Perigee, en el que varios artistas de YEN colaboraron (sin acreditar), entre los cuales, por supuesto, estaba Jun, la que hizo de vocalista en algunas canciones.

Cosa que, sea dicho, fue un añito después de Guernica, la que fuera su primera banda. La premisa de este trio era ser una revisitación de los años 20 y 30 (el periodo Showa lo denominan), apoderándose de la estética del cartelismo proletario y la actitud vintage. Su sonido era una especie de cabaret anfetamínico en Shangai perpetrado por las fuerzas ocupacionistas japonesas. Las composiciones corrían a cargo de Koji Ueno, un ex-anarchopunk, con sensibilidades dadaístas y pirrado por la memorabilia, que terminaría rindiendo tributo al cine mudo en solitario y convirtiéndose en instrumentista de bandas sonoras, con colaboraciones con Ryuichi Sakamoto y David Byrne en el El Ultimo Emperador, y trabajos propios componiendo para una adaptación de Rampo, la languidez delirante de Tokyo: The Last Megalopolis y en el presente underscores de juegos de PS3 para SEGA.

Jun, por su parte, estaba encantada de poder vestirse e interpretar papeles extremos de flappers opulentas y malvadas oficiales con chapiri. Dando fuerza a la perfomance, provocando con diretes y entregada a cantar mediante vocales frenéticas las satíricas letras de Ohta Keiichi, el que también tuvo sus pinitos como cantautor synth, aunque sea mas reconocido como ilustrador erotico grotesco. Todo ello desde una pose arty sumamente irónica, tomando la actitud de ese orgullo del Japón imperialista en su auge colonialista, en unas épocas en la que el país estaba subido a una parra similar al ser una de las mayores potencias económicas mundiales. El primer disco, Kaizo He No Yakudo, es el mas delirante, ya que contaba con los arreglos electrónicos de Haruomi Hosono, fusionando synthes y delays con clásicos modernos acelerados hasta la extenuación. A finales de los 80 retomaron el proyecto con un par de discos más, el segundo con cierto royo conceptual radiofónico, pero abandonado el híbrido electrónico, detalle que no los hacia tan enloquecidos, al acompañarse solamente de orquestaciones clásicas puras y duras.


Pasada esta etapa, Jun se confirmaría como anti-idol, haría de vocalista casual del grupo post-punk Halmens (liderado por su coleguita Koji Ueno) y formaría algunas bandas itinerantes que darían pie a los Yapoos, los que a pesar de activarse en el 84 editando rarezas en directo para YEN, no llegarían a sacar LP oficial hasta bastante mas tarde. Inquieta como era ella ese mismo año de la fecundación de su futura banda editaría su primer solitario, el cual tuvo los santos cojones de que fuera un directo. Perpetrando con Tamahime Sama unos alardes en dosis industriales de power-synthpop verbenero y partiéndose la voz como una puta perra todo el disco. Su look para las actuaciones de entonces era el del pelo crepado con floripondio en la cabeza, hecha un regalillo con un traje rosa de topos negros y alas de hada, las que movía de manera epiléptica por el escenario. Imagen que posteriormente mutaría a un recatadísimo vestidito de flores, con una diadema coronada con lucecitas y un brazo bionico.


Todo ello con un tono de burla hacia las idols que abastecían al j-pop de entonces. Incluso se curró un perturbador video para una canción babosa al mas puritito estilo de la belguita Lio, donde parodiaba los típicos primeros planos con la tópica cantante nipona llorona que pone carita compungida como si estuviese a punto de recibir un bukake. Al loro, que el desenlace es de esos que te dejan con el culo torcido.


Un añito tardaría en sacar nuevo trabajo, ya con YEN a punto de palmarla y acompañada por su Jun Togawa Unit. En esta ocasión se alejaba deliberadamente del pop exaltado para hacer un disco de arreglos mínimos, dispar, como era la norma, en el que daba puntadas de folk nipón mientras taladraba con voces infantiles, cambiando como quien no quiere la cosa al dark minimal de percusiones industrialoides, con ella sin poder evitar hacerse la Diva y amenazando finalmente de volver al popazo más alienante. Y así fue, ya que en el mismo 85, saca otro disco, con sus venas j-pop descerebradas, una vuelta tímida a la clásica moderna de Guernica y canciones Bubblegum locatis, que a veces suenan como si las The Go-Go's fueran sodomizadas por androides con pollas brillantes dibujadas por Hajime Sorayama. La canción que da nombre al disco, Suki-Suki-Daisuki, es un hitazo socarrón de alto voltaje, a medio camino entre el j-pop caramelizado y la voces operísticas. Lógicamente para este tema también se marcó un video haciendo la pantomima, en esta ocasión caracterizada de todos esos roles parafílicos de los que se vestían las populares terneras japonesas.


Después de esto hace un alto importante de su carrera en solitario, que retoma esporadicamente en el 89, con Showa Kyonen, disco paralelo al ultimo de Guernica, con Ueno metidito en el berenjenal, siendo continuista de ese rollo de memorabillia folkie y de la canción popular nipona, y con un quinto tema que es una cover de La Princesa Caballero (Ribon no Kishi), un anime de los 60 basado en un manga de Tezuka. En esta ocasión Jun se viste con un uniforme militar y va medio descamisada con una katana a la espalda e incluso se hace un sesión fotos promocional ataviada de Matahari. En todo caso durante estos años tampoco es que se estuviese quitecita, sino que tiró para adelante su banda Yapoos, con la que parecía sentirse mas cómoda que en solitario, ya que sus últimas etapas mas creativas son como frontwoman de dicha formación. En el 87 editan Yapoos Keikaku, que tiene la capacidad de comenzar con un spy-pop redondo sobre una especie de Cherry 2000, tema que se convertiría en uno de los emblematicos de la banda (y que hasta reversionarian por aclamación popular en su último disco), para seguir los devaneos de rigor de Jun forzando su vozarron en engoladas melodias, hasta asentarse en el after-punk mas darky en otro de sus temas caníbales mas reconocidos.


Con los Yapoos llega a editar 4 discos mas, en el segundo, Dai Tenshi no Yo, aunque siguen con la mandanga de post-pop electrónico raruno, comienzan a perder pachanga New Wave, a volverse tenues y dependientes de las excentricidades de Jun. Ya entrados en los noventa se nota la llegada como support de los directos y productor del guitarrista e integrante de P-Model (otros dignísimos hijos bastardos de los Devo) Susumu Hirasawa (el cual venia de trabajar con ella en su ultimo solitario retro). Así que con Dial Y wo Mawase! acaban mutando su popazo excéntrico a un palo con tintes Space, tímidamente Gazers y directamente Techno-Pankis, siempre, por descontado, con la idas y venidas bipolares de Jun al canto. Sus últimos dos albums, Dadada Ism y Hys, del 92 y el 95 respectivamente, depuran dicha evolución y guardan iguales dosis de pop electrónico irascible, agresividad candorosa y calma chicha, pudiendo considerarse una de las principales influencias de grupos post-Shibuya Kei como las eX-Girl, unas hijas devotas de Togawa que le deben tanto ella como al productor Hoppy Kamiyama, que curiosamente le haría las faenas de su ultimo album hasta la fecha.


A pesar de que ha seguido siendo explotada en varias compilaciones, dicen las malas lenguas que Jun no ha hecho mas cositas porque no la soporta ni cristo dado su carácter egocentrico e impredecible. Aun así aun sigue haciendo sus incendiarios directos para los jovenes nipones, con pelucones de colores y contoneándose con vestiditos victorianos pastel mientras se recoloca el relleno de las tetas, vamos, cachondeandose soterradamente de las nuevas idols, como a ella le gusta. Sea como sea, en 2001 el noiser loco Otomo Yoshihide la recuperó como vocalista para su colectivo free jazz, con el que editó Dreams, bajo el amparo de el sello Tzadik. De hecho, John Zorn ya le tiró una florecica en el Classic Guide To Strategy Volume 1 & 2, poniedole su nombre a una de las canciones. También volvió en solitario con un disco de versiones con el que comemorar sus 20 años, en 2000, donde se marcó covers radioactivas de Brigitte Fontaine, Vanessa Paradis, Nico o Patti Smith, en contenida clave distorsionada, aunque muy lejos de su espíritu ultrapop de idol dadá.

viernes, 25 de febrero de 2011

Discografías Perfectas: The Shaggs




La historia de The Shaggs es de sobra conocida: La obra de un padre amante, visionario, iluminado y dominante, que buscaba la realización a través de sus retoños. La anécdota nos enseña a eso que tranquiliza a los adolescentes en sus cubículos llenos de dolor resbalando por las paredes: A luchar por un sueño.

A la abuela de las niñas una gitana le leyó la palma de la mano y le dijo que su hijo se casaría con una pelirroja que antes de morir le daría tres hijas que formarían una banda musical de gran éxito. Austin, que así se llamaba el padre, cuando vio que su esposa moría lo vio todo transparente: Tenía que obligar a Betty, Helen y Dott a formar un grupo, y las mandó a dar clases de guitarra y canto. Las niñas aceptaron por la cuenta que les traía, y porque lo del grupo les sonaba bien. Al fin y al cabo, nunca habían ido a un concierto, eran vírgenes y nadie les hacía ni caso.

Betty compuso 12 canciones encantadoras, sobre las cosas que le preocupaban e iluminaban su existencia, como las mascotas perdidas, los novios aburridos, la fantasía de Halloween, los cambios misteriosos de la pubertad, y cosas así, y estuvieron encerradas y obligadas por Austin a ensayar duro, hasta que dieron con la forma del disco. Tenían un nombre fantástico, "Philosophy of the World", sólo les quedaba grabarlo. Corría el año 1969.


Los técnicos flipaban al ver lo perfeccionistas que eran. Las chicas paraban la grabación porque decían que se habían equivocado, y los técnicos no se podían ni imaginar dónde estaba el fallo.

De las 1000 copias que encargó Austin 900 se perdieron, y sólo sobrevivieron 100. Frank Zappa llegó a decir que eran mejores que los Beatles, y en 1980 se reeditó su disco, a pesar de que Austin murió cinco años antes, momento en el que las hermanas abandonaron el grupo. El mismísimo Kurt Cobain las citaba orgulloso, y se ha dicho toda clase de chorradas sobre ellas, que si son las madres del punk, que si son el DIY por excelencia...


Si algo hacían The Shaggs era pop puro y duro. Pop que brotaba de su subconsciente, y no por iniciativa propia, sino bajo la presión del padre castrador y despiadado que les había tocado. Llegó a obligarlas a tocar en un bar todos los viernes hasta su muerte. Ellas ahora recuerdan esos años con... digamos discrección, y les apena que su padre no llegara a enterarse del lugar que ocupan en el olimpo del pop.





Iconos Pegamin: Fernando VI

Primero por casarse con un tía que se llamaba Bárbara de Braganza, que hoy en día pasaría por una drag excesiva y cochinota. Segundo porque era un procrastinador nato, una de las características más españolas y pegaminas, un dejado que esquivaba el trabajo y la práctica política como si fueran dagas malayas impregnadas en curare. Tercero porque, a pesar de ser Borbón, su entrega y amor hacia su santa fueron de tal magnitud que, cuándo ella fallece, enloquece -literalmente- y se retira de los fastos y vanidades de lo mundano para acabar recluído, hasta su muerte, apenas un año después de la de su esposa. Todo esto le convierte en un icono de lo comodón, lo falto, lo bizarrete y el hedonismo de segunda regional que gustamos por aquí, claro. Pero, lo que de manera absoluta le convierte en digna figura de nuestro panteón de todo a 0,60 es el intento de expulsar a todos los gitanos de España en el año de Nuestro Señor de 1749, mediante una operación estratégica conocida, como no podia ser de otra manera, con un nombre digno de album de Mortadelo y Filemón: La Gran Redada.
Conocida también como, atentos a la eufonía, Prisión General de Gitanos, ésta persecución dieciochesca tenía, en opinión de algunos exagerados historiógrafos, la finalidad de apresar y "extinguir" a los calorros de los territorios españoles en una operación semisecreta y contundente que supondría una "Solución Final" en toda regla: arresto de todos los gitanos para  separarlos inmediatamente después en grupos en razón de edad y sexo: los varones mayores de 7 años irían a trabajos forzados  y las mujeres y los niños pequeños a cárceles y fábricas, financiando la operación con los bienes incautados a los detenidos, en un antecendente teórico clarísimo de lo que sucedió dos siglos más tarde con los judíos. Al final, la cosa no pasó a mayores, deteniéndose a unos 10.000 calorros que, entre otras cosas, en algo menos de un lustro, acabó en un indulto generalizado debido a que no daban chapa en las minas, generaban unos gastos enormes y debían dar una matraca considerable cantando sus penas por siguiriyas. Por eso, cuando uno de estos  alegres nómadas, que decía Bertín Osborne, ofenda su vista o su oído, atente contra su honor o posesiones o, simplemente, despliegue su folklore atorrante piense que se lo debe y que existe una deuda histórica, payo risión.

Todos lo sois

jueves, 24 de febrero de 2011

lunes, 21 de febrero de 2011

Minutos Musicales

Pegamin te escucha

Esta mañana, en la facultad, un chico y una chica, de unos veinte años.
Chaval: Pues a ver si apruebo estas tres y tengo el verano libre
Muchacha: Ya ¿Vas a ir a algún sitio o algo?
Ch: Voy a ir al FIB con los amigos de -pueblo cuyo nombre no recuerdo - que este año está muy bien
Mu: ¿Qué es eso del FIF? (sic)
Ch: ¿No sabes lo que es? un festi de música y eso, van Strokes y Artic Monkeys y más gente. Es bastante conocido
Mu: Ah pues ni idea, no me suenan esos grupos ¿que tipo de música es, no será jevi no?
CH: No no, es rollo, no se, así rock tipo pop...
Mu: Ya bueno, muy conocidos tampoco serán
Ch: ...

Y aquí es donde yo me pregunto ¿en serio existe gente que no sepa que son el FIB y los strokes?

Conciertos Pegamin

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sábado, 19 de febrero de 2011

No sé cómo decíroslo...

viernes, 18 de febrero de 2011

El último concierto de los Judas Priest


Ya tengo la entrada que me da acceso al infierno. Si todavía no la tenéis no sé a qué estáis esperando, putos moñas. El miércoles se pusieron a la venta; son 60 euros de mierda y es la última gira del god of metal (entrada única, no hay mariconadas para verlos sentado). Hasta las modernas-petardas tipo Grace Morales que han descubierto el rock duro jugando al guitar player lo recomiendan encarecidamente, será porque el cantante entiende.... el caso es que NADIE se lo puede perder. Nos vemos allí pringaos, además como la sala es de techo corredizo seguro que se puede poner uno hasta el tapón de porros. Acojonaaaannnnteeeeeeeeeee!!!!!!



El concierto entero que cambió nuestra vida: link

jueves, 17 de febrero de 2011

Minutos Musicales

Soothing lesson for Ano-nis

miércoles, 16 de febrero de 2011

martes, 15 de febrero de 2011

Pegamin es buen rollito









Fondos de cohesión europea

Y en verdad os digo que me he mamado con vuestros impuestos.
Y en verdad os digo que como yo, lo han hecho otras decenas de estupendos profesionales del mundo del cine.
Y en verdad os digo que esa barra libre, esa dj, esos camareros, esas personas del guardarropa y ese fenomenal equipo encargado de la limpieza, han salido de fondos europeos.
Y en verdad os digo que los actores y las actrices son las personas más intensas de este planeta.
Y en verdad os digo que una productora italiana se ha rendido a mis pies cuando le he dicho que escribo en el Pegamin. Ma como? il pegamin? vero?
Y en verdad os digo que en tres horas volveré a estar en pie, esta vez pedaleando como un imbécil durante 40 minutos para ir a clase.
Y en verdad os digo que mis mails enviando el curriculum en inglés son contestados por un mismo bot que los devuelve en alemán. Leider müssen wir Ihnen mitteilen, dass wir Ihre interessante Bewerbung nicht weiter verfolgen können, da zwischen-zeitlich eine weitergehende Entscheidung zu Gunsten einer anderen Bewerbung getroffen worden ist.
Y en verdad os digo que cada semana varias personas me escriben sorprendidas de que no haya encontrado trabajo.
Y en verdad os digo que al siguiente que me diga pero si merkel... le pego un puñetazo.
Y en verdad os digo que esta crisis es para los pringaos.

Un intenso representando la situación

lunes, 14 de febrero de 2011

Friedman

domingo, 13 de febrero de 2011

viernes, 11 de febrero de 2011

Discografías imperfectas: Blitzkrieg

Es una pena que, como ocurre con la banda que nos ocupa o sus contemporáneos Diamond Head, haya siempre que mencionar las versiones que realizó Metallica para que la gente pueda decir "ah, sí, me suena". Digo que es una pena porque no estamos hablando de grupitos de tercera que sacaron un single y se echaron a dormir; el Lighting to the nations de Diamond Head es considerado piedra angular del género y la carrera de Blitzkrieg, aún sin gozar del éxito que merecían, es consistente como pocas.

Dejar a un lado vuestros prejuicios y adentraros en la discografía de mi banda de NWOBHM favorita. Un grupo que alterna temas muy duros y crudos con otros extremadamente melódicos y que, a la hora de crear sus letras, se ha apoyado firmemente en la cultura popular.
Lo dicho, darle una oportunidad, a lo mejor os sorprendéis.
Señó prieh, ¿le importa que me siente aquí a su lado mientras usté habla deste conjunto musicá?
Ay, qué estarás tramando Pegamito...
Nah de nah, se lo juro por las chichis. Solo quiero aprender para ser alguien en la vida el día de mañá.
Y ¿no sería mejor que estuvieras en la escuela de enanismo, tunante?
No, me ha disho la máma que me quede con vosotros. Que sah prende máh con el pegamin que en el cole. Dise que uhtedes serán mis profesores, mis mentores. Como el padre que m'abandonó. Pegamito, dijo, coge turno en la carnisería, que voy a comprar tabaco. Y hasta hoy. Que digo yo que se tardaba menos plantándolo en una maseta de casa.
Ay, la que nos ha caído... Bueno, te puedes quedar. Pero calladito, eh. Y trae un par de mandarinas de la cocina, que necesito vitamina C. Tengo un no se qué en la garganta que...
Si señó, ahora mismo.

Court in the act (1983)
Puede parecer extraño pero para hablar de Blitzkrieg, primero hay que hacerlo de Satan y su primer disco Court in the act.
Blitzkrieg se crean en 1980 y, como ocurre en los momentos de gran efervescencia musical, el baile de componentes entre distintos grupos es enorme. El grupo lanza unas cuantas demos y singles e inicia un ritual que le acompañará hasta nuestros días; el cantante Brian Ross disuelve el grupo y para cuando lo vuelve a montar, solo queda él como miembro.
Es en ese momento cuando el primer disco de Satan aparece, con Brian Ross a la voz sustituyendo a Lou Taylor (quien luego le sustituiría a su vez al retomar la actividad con Blitzkrieg) y con el batería Sean Taylor como único músico que aparece en ambos primeros discos, además de Brian.
Señó prieh, señó prieh, tengo una pregunta.
A ver, dime.
¿Lou Tyler y Sean Tyler son hermanos?
Pues no lo sé, creo que no. Puede ser.
¿Y primoh?
Ni idea, Pegamito.
¿Y tío/sobrino?
Que no lo sé, Pegamito, coño, no te pongas pesado.
No senfade, señó prieh, no senfade, que tiene usté unoh prontoh mu maloh.
Bueno... y ¿a qué viene ese súbito interés por el parentesco de estos dos?
Hombre, que sho seh cosah.
¿Cosas? ¿Qué cosas?
Que fuera de Ehpaña la gente se casa y pierde un apellido. Ya sabe usté...
Pegamito, hostias, no me guiñes un ojo, que parece que tienes un ojete en la cara. ¿Que cojones me quieres decir?
Pueh que si no son parientes entonces Sean y Lou son... del otro laó.
Pero que lado ni que coño, Pegamito.
Del laó de lah risah. Ya sabe. De jugá al beihbol. Lou eh pihcher y Sean es cacher. O al revé. Pero que juegan al beihbol, seguro.
Que no me giñes el ojo, cojones, que da mucha grima. Y déjate de tonterías, que todavía no he terminado con el disco.

Que si son maricones, dice... En fin, para los que no hemos escuchado las demos de Blitzkrieg, este Court in the act sirve como perfecta carta de presentación del grupo: sonido 100% NWOBHM, muchas dobles guitarras, la extraordinaria voz de Brian y composiciones muy curradas con estribillos pegadizos pero sin caer en el pasteleo, salvo en alguna balada concreta. Es un poco más veloz y agresivo pero tampoco mucho más que el A time of changes, aunque desde luego hay una mayor presencia de las guitarras.
Tiene temas que no se los salta un gitano, como el cañerísimo Trial by fire, versionado por Blind Guardian, la instrumental The ritual o el cierre del disco Alone in the dark, por mencionar tres casi al azar.
Disco básico para conocer la versión más acelerada de la NWOBHM.



A time of changes (1985)
Curioso que el disco más directo y crudo del grupo comience con una intro... Aunque claro, ésta no es una intro coñazo, esto es Ragnarock anunciando una pequeña ensalada de hostias en el siguiente tema, Inferno.
Señó prié, perdone que le intehrumpa pero ¿a qué suena Infenno?
Pues a qué va a sonar, mameluco, suena a cuatro minutos moviendo la puta cabeza.
Uhté perdone, eh que no ehtoy acostumbrao y claro... hágase cargo...
Ya, ya...
Pero el ziguiente tema eh má zuave, ¿no? Aquí pone que ze llama Bihquit. De galleta, en inglés. Con shocolate.
¡Blitzkrieg, infeliz! Y no solo no es más suave, si no que es el tema que cogieron Metallica para hacer su versión años ha. Una maravilla de canción a toda mecha con la que seguir moviendo la peluca.
¡Olé esa permanente de marujita diaz!
¿Marujita Diaz? Ven aquí, desgraciado, que te voy a dar con el cinto hasta que te aprendas todas las formaciones de deep purple.
Nooo, con er sinto balah nooo...
Nada, el cabronazo se ha escondido en algún cajón de la cocina. Jodido niñato. A ver si por lo menos ahora puedo seguir con tranquilidad.
El tercer tema, Pull the trigger, fue originalmente compuesto para Satan. Me parece llamativo porque podría ser el más claro single del disco. Es un poco más tranquilo y tiene un estribillo de fli-par. Clásico.
En un disco habitual, al llegar al cuarto corte, la morralla o las canciones mediocres hacen su aparición. No es el caso de Armageddon, un tema veloz que es de mis favoritos.
Hell to pay es el primero que me llama un poco menos, aunque tiene la gracia de que en segundo plano suena una multitud cogida de un directo de Queen. Es una pequeña broma para todos aquellos que acusaron a su demo Blitzed Alive! de ser un falso directo.
Vikings es un medio tiempo que no me dice mucho, aunque solo por la voz de Brian ya merece la pena.
Llevabamos dos canciones seguidas un poco flojeras y esto no podía continuar así. Por eso los guitarras se sacan de la manga un riff cojonudo con el que engancharte al tema que da nombre al disco, A time of changes. Una pequeña maravilla que transmite el tono apocalíptico de su letra.
El album se cierra con Saviour, que cumple la regla del undostrescuatro: cualquier tema que comienza con alguien gritando "one, two three, four" siempre es un corte directo y basicote. A mi me recuerda un poco a maiden en los cortes más macarras de sus primeros discos.

Os dejo con el tema Inferno, aunque escuchar solo una canción no es nada representativo de la grandeza de este lp.



Unholy Trinity (1995)
Que en el 95 Brian reformara el grupo y sacaran un disco como éste, me deja anonadado. No solo porque las composiciones parezcan sacadas de las sesiones del primer disco, es que el sonido, la portada, etc. te teletransporta a principios de los ochenta. Prueba de ello es que el disco se abre con Hair Trigger, un temazo del copón con el sobrenombre de Pull the trigger 2. Hay que tenerlos muy gordos para enmendarle la plana a una de las mejores canciones del primer disco y salir victorioso.
No sé si tuvo éxito o repercusión, la suya era toda una declaración de intenciones pero también una apuesta imposible. Aún así el tiempo lo ha puesto en su lugar; ni más ni menos, que como uno de los mejores discos de la NWOBHM (sí, habéis leído bien, NWOBHM en el puto 1995). Una maravilla que está ahí ahí con el primer disco en cuanto a calidad. El primero es más directo y cañero, el segundo algo más melódico y con menor presencia guitarrera.
Lo único malo que se puede decir de él, es que es jodidamente largo. Estamos hablando de 15 temas más dos cortes de poca más de diez segundos en forma de chorrada (Zip y Return of the zip). Ojo, que salvo la versión totalmente prescindible de Countess Bathory (de Venom, para los neófitos) son todos una maravilla pero se sigue haciendo un poco largo.
Difícil destacar temas siendo el nivel tan alto: Struck by lighting, Take a look around (compuesta para el primer disco y que se puede encontrar ligeramente más larga en el recopilatorio de "rarezas"del primer disco A time of changes: Phase 1), Crazy for you o Calming the savage beast podrían ser mis favoritos pero ya digo que son todos disfrutables (me viene a la cabeza cortes como Easy way out, Jealous love o la muy pegamina House of pleasure: "try sixty-nine, all positions are fine" - "you pay you money, make your choice, you are in the house of pleasure").

¿Donde se habrá metido el renacuajo éste? Anda, bajaros el disco mientras le busco. Os pongo la única canción del disco que he encontrado por internet, Hair trigger.




Ten (1997)
Nada que no hay manera, no está ni entre los cazos ni en la lavadora. Bueno, que le den, me pongo con...
Socorrooo, socoooorrooo...
Pero, ¿será posible? ¿Qué haces en el cubo de basura orgánica?
Vi el pico de un plátano sin terminar y...
Ay Dios. Venga, sube, desecho humano.
Musha grasia. Que mal rato queh pasao. ¡Un abrazo!
¡Aire! ¡Aire! ¡Esperpento!
¿Quieres, por favor, quitarte ese condón usado de la cabeza para que pueda empezar a hablar del disco?
Ups...
Si utilisharan un canahtito solo pa las gomah ehto no pasharía.

Qué cruz...

Venga, va, sin paños calientes; éste es el disco más flojeras de Blitzkrieg. No es que súbitamente se pusieran a hacer nu-metal o una mierda por el estilo, no. El problema es que las canciones son... rutinarias. La inspiración en este disco brilla por su ausencia y aunque siempre es un placer escuchar la voz de Brian, no hay mucho que rascar.
Las mejores canciones del disco; Buried alive, Night howl, Nocturnal Vision y I'm not insane palidecen ante los mejores temas del resto de discos. Vamos, que si tuviera que hacer un recopilatorio del grupo, como mucho metía Night howl en plan testimonial.
I'm not insane empieza con un bajo distorsionado muy guapo que realmente transmite la idea de locura pero aunque tiene partes muy buenas, le falta chicha para durar 5 minutos y medio.
Tampoco está mal la canción Court in the act, pequeño homenaje a la otra banda de Brian. Graciosa pero poco más.
El disco se cierra con Nocturnal Vision, un pequeño homenaje a Alice Cooper. Como decía, de lo mejor del disco.

¿Yasta? ¿No dishe nah mah der dihco?
No, Pegamito, no, nada más. Bueno sí, que poco antes de terminar tenemos una revisión de su clásico Blitzkrieg que no soporta la comparación con la original por ningún lado. Horrible el mini teclado inicial. Solo a un Ender hasta arriba de meta-g se le ocurriría incluirlo.
¿Meta-g?
Metagilipollez.
¿Que eh la metagilipolleh?
Eh... es cuando... a ver... tienes la gilipollez, ¿no?
Sih, claro que sih.
Pues entonces tu discurso trata y utiliza... espera, no, a ver cómo te lo explico.
Tomese su tiempo, que voy hasiendo un cuadernisho rubio mientra.
Por ejemplo, si tu pones una foto de... digamos una vaca.
¿Una vaca? ¿Como la de los quesoh? Ah, claro, por eso se rie, ¿no? Por la meta-g, ¿no?
¡No, no! Es un ejemplo, podría haber dicho... yo qué se, un cubo de basura.
Pero loh cuboh no se rien, no tiene sentio. Sho creo que usteh no sabe mu bien lo que eh la meta-g...
Qué no se lo que es la... mira, déjame en paz, que te lo explique Ender, yo tengo todavía varios discos por delante y me estás agobiando.
No, Ennde no, que me mira raro.
Qué te va a mirar raro.
Sih, que me mira por ensima del hombro.
No está acostumbrado y le hará ilusión. Venga, anda, desfila.



The mists of Avalon (1998)
Concebido como disco en solitario de Brian, este The mists of Avalon es un disco raro, raro, raro... pero en absoluto malo, cuidadorl.
Comienza con una canción con momentos muy buenos divida en cinco partes dedicada a todo el rollo de Camelot, el rey Arturo y su puta madre montando en triciclo. Vale, un grupo heavy hablando de espadas y reyes, qué sorpresa.
Pero, ¿y si os digo que, unos pocos cortes más adelante, la canción Princess of the world no habla precisamente de Ginebra? ¿Y si os recuerdo que en el 97 muere Lady Di? Os habéis quedado regaliz, ¿eh?
Pues sí, según cuenta el propio Brian, estaba muy afectado por el suceso (¡!) y por eso compuso el tema. Composición que rebosa almíbar en su primera mitad, no en vano la letra empieza con "I sing a song for the one I never met even we felt we knew you anyway" y contiene perlas como "you were there for the lost and the lonely". El tema es bastante repugnante aunque un riff más o menos chulo a la mitad de la canción intenta salvar los muebles.
Cortes llamativos también son I'm the Doctor (Who are you?), sobre el personaje de la serie de televisión británica, Another interview?, sobre la película Entrevista con el vampiro o I Was Having A Great Time And Stayed Longer Than I Should, So When I Got To The Railway Station, The Last Train Had Gone!, un chistazo de 7 segundos de duración en la línea de Zip.
Curiosidades aparte, los mejores cortes del disco son Vicious Rumors, con un ritmo muy juguetón, Deceiver, la balada Yesterdays (hope for the future) y Love's too late, probablemente el tema que más me gusta del disco y más suena a los Blitzkrieg del Unholy Trinity.

En general, es un disco que lastra su larga duración, pues al contrario que el mencionado Unholy Trinity, aquí sí que hay canciones de relleno.
Haciendo una limpieza de 4 o 5 temas, queda un disco la mar de majo.

Pegamito, ¿ya estás otra vez aquí?
Es que dise Julito que vaya a su casa, que Xabi se ha enserrao en el baño con Pussy y Millana a aser juego acuaticoroticol y no saben que Ender está asiendo unoh largoh en el vaso de enjuagarse.
¡Santo cielo! A ver, Pegamito, te dejo al mando. Entretén a nuestros lectores.
¿Y que hago?
No sé, cuéntales un chiste.
¿Un chiste? ¿De que?
Ni idea Pegamito, me tengo que ir. Del Holocausto, yo que sé.
Ay Dió, qué tensió.



Absolute power (2002)
Pueh parese que Prieh no llega. Empesaré sin él.
A mi paresé que ehte e un dihco de musho miedo. La primera cansión se llama Legion y en las notah de prieh pone que habla del libro El Exorsista. Anda, pue yo pensaba que las frases en latín eran del padre de la Millana, que era un hombre mu culto y de musha lectura.
El dihco tiene otrah cansiones de ehcushar debajo lah mantah; Soul stiler, De feis of deh, Dark siti o, cuidadin con ehta, Terror sone. Sona del terró, en castellano, pa los que no sepan idioma. Ahí eh na.
De ehtah, a mi no me ha guhtado musho ninguna porque claro, para no pasar miedito, me tapaba los oídos. Y maburría.
Qué máh... Hum... El sedé tiene dose cansiones y en la portada sale la mariposa de todo loh dihco pero esta vé se nota que ha ido al cultursenter y ha hesho pesah. Pa mi que ehtos Blitzkrieg son un poco...
¡Pegamito!
Ohtia, el prieh.
¿Qué desastre de crítica es ésta?
Yo...
¿No ves que así nadie va a escuchar este disco tan bueno, que no motivas a nuestros anónimos para ir a un festival en el extrajero, ver al grupo y comprar sus discos?
Lo siento, prieh, ehto del periodihmo musicá eh mu duro y no he ehtao a la altura emosioná nesesaria.
Bueno, bueno, no llores Pegamito. Es cierto que es un periodismo complicado y muy sacrificado. Venga, vamos a comentar juntos el siguiente disco, ¿te parece?
¿Si?
Sí, venga.
Queh buenoh eh usté. Me recuerda al padre que fue a por tabaco y...
Pegamito, coño, otra vez, lo de tu padre no.



Sins and greed (2005)
A ver Pegamito, ya has escuchado el disco, ¿que te ha parecido?
No lo sé...
¿Como que no sabes? Algo te habrá parecido. A ver, comparado con los anteriores, qué piensas de él.
Pueh... me ha parecido similá al anterior, aunque con alguna canción más como las antiguas, ya sabe, de cuando la mariposa todavía no había hesho pesá y abdominale.
¡Muy bien, Pegamito!
¿Si?
Sí, yo también pienso parecido. Por un lado es una continuación del anterior Absolute Power y por el otro hay una perdida del miedo a no parecer lo suficientemente potentes y recuperan tonos más melódicos, que son también seña del grupo.
Tiene una versión totalmente prescindible del Hell bent for leather de los judas, una balada que no me gusta nada y tres temas muy buenos: Standing still, Excessive force y Back to the village, basada en la serie The prisioner.
¿Y desoleison enyel?
Desolation angel también mola, sí, bien visto.
¿Y, qué piensa er vulgo de este dihco?
Joder Pegamito, se te echa un piropo y hay que ver cómo te creces...
El que vale, vale.
Por lo que he leído y hablado, es el disco de los 2000 preferido por la peña. A mi no me parece tan distante del Absolute power en cuanto a calidad y me parece que está bastante por debajo que el Theatre of the damned, el último que nos queda por comentar.
Iletraos... gente sin curtura musicá que no sabría reconocé un buen jamó pata negra ni aunque mataran al cerdo delante suyo...
Venga, anda, presenta la canción que hemos escogido y déjate de tonterías.
La cansió se llama Estandin estil y prieh me ha disho que como no la escuchéis va a mandá un ejersito de trols a vuestros forsprin.



Theatre of the damned (2007)
Así como Absolute power y Sins and greed me parecen buenos discos cuya mayor pega es que dejan un poco de lado la vertiente más NWOBHM de Blitzkrieg, este Theatre of the Damned consigue una mezcla perfecta entre sonar actual y potente y mantener plenamente identificables las raices del grupo.
Las composiciones, además, son de lo más inspiradas y ninguna baja del 7.
Como curiosidad, el grupo vuelve a revisar su clásico Blitzkrieg, con mayor fortuna que en el disco Ten, y, también del primer disco, Armageddon. No están mal, un poco faltas de fuerza, pero son innecesarias. Aunque bueno, si un solo oyente se acerca al primer disco gracias a estas actualizaciones, bienvenidas sean.
Mis temas favoritos del disco son los tres siguientes:
Spirit of the legend, que habla sobre un chico que compra una misteriosa guitarra en una tienda y a partir de ese momento no puede dejar de tocarla. El chico intenta devolverla pero la tienda ha desaparecido. A partir de ese momento, nuestro guitarrista se deja el alma y los dedos creando música hasta que le encierran en un manicomio. Al final, la guitarra vuelve a ser comprada por otro chaval.
No me cuente ehtah cosah, señó prieh, que luego no duermo. Que lo único que nos dejo mi padre fue una botella chinchón y una guitarra...
No te preocupes, Pegamito, que es una metáfora.
Ah, pueh menoh mal.
¿Qué e una metáfora?

Pegamito, que te lo explique Tereso, que parece que nunca vamos a terminar con esta discografía...
Into the light, precedida por la intro The passing, es un medio tiempo precioso sobre alguien que palma y va a luz, a la luz, a la... ¡Pegamito! ¿que coño haces? ¡Que te vas a caer por el balcón!
Ay, me he dejado llevar por el momento. Es que suena usté tan convisente cuando se pone melancólico... la luz que entra por la ventana... el sonido de la naturaleza...
Pero qué cojones dices, la luz que entra por la ventana es una farola con la bombilla medio fundida y el sonido de los grillos es el camión de la basura.
En habiendo sentimiento...
Por último, Together we are strong es La Canción. Puro Blitzkrieg. La letra y la música hablan de cuando dos personas llevan tiempo juntos pero aún así se necesitan, se completan y sienten que, inspirados por el amor que profesan al otro, quieren ser mejores personas. Y, créeme Pegamito, esto es algo que no se siente todos los días...
¿Se encuentra bien señó prieh?
Sí, sí, perfectamente.
¿Sehuro? Le noto mohino.
Es solo que... memorias... vuelven para hacerme daño...
¿Eso no es una frase de una cansió de Judah Prieh?
Ejem... déjame solo, por favor, déjame...
Me sabe mal...
Por favor...
Bueno, adió.
Adiós.

Te veo en el facebook. Has cambiado tu foto de perfil. Estás embarazada de al menos 7 meses y estás radiante. Igual de bella que siempre. La mujer más guapa con la que nunca he estado. Han pasado más de dos años pero no he olvidado como me hacías sentir especial.

"You took me as I was and made me what I am and show me what I could be"

jueves, 10 de febrero de 2011

miércoles, 9 de febrero de 2011

martes, 8 de febrero de 2011

Holocausto Subnormal.












¿Qué putada lo de Vigalondo, eh? Cuando todo parecía ir encaminándose hacia el estrellato, las mieles del éxito, el reconocimiento en los círculos de entendidos y también en los medios generalistas, con un boyante foro a su servicio atestado hasta las barras de lowlifers dispuestos a reir, aplaudir y celebrar (no sin aderezarlo todo en una crítica sesuda y referenciada) cualquiera de sus geniales ocurrencias, va nuestro más joven creador internacional y se topa con Ello.

Y donde digo se topa, digo le dan una en todo el morro. ¿Habéis visto "Rockanrolla"? Ja ja ja, ¡Claro que sí! ¿Quién no ha visto todo hoy día? Pues le han dado un bitch-slap. Como dicen en la película, te retrotrae a la infancia. Te recuerda cuando eras un putocrío y no tenías ni puta idea de nada y alguien tenía que educarte. Perdonadme que me aventure en la mente de un cántabro, pero apostaría mucho dinero a que nuestro joven realizador ha debido sentir algo así con todo el holocáustico asunto.



Nacho Vigalondo nunca me ha caido bien. Lo elegí hace tiempo para que personalizase cierto aspecto asqueroso de mi mismo y de mi generación: La vida real no nos gusta y decidimos no tener una. Nos refugiamos en lo más fácil, en lo que nos han alimentado con una cucharita desde pequeños. Y en el fondo, no es más que parte de lo que no nos gusta. Nos recreamos en ello. Ni siquiera con desesperación existencialista ("todo es estúpido, lo mejor es estar entretenido y no pensar en ello") sino por pura ignorancia acomodaticia. Aparte de esto también he pensado siempre que Nacho tampoco es el fósforo más brillante de la cajita, exceptuando su sobrehumana capacidad para la inteligencia emocional y las relaciones. Con lo cual me ha dado siempre bastante por el bul.


Ahora por primera vez, estoy sintiendo un poco de empatía con el chaval. También hay que decir que toda la empatía que puedo sentir por un ser humano que se presenta ante sus semejantes en un pijama estúpido y con un iPad en la mano haciendo propaganda de un periódico criminal. Espero que espabile un poquillo. O no, al final me la pela. Pero no me gusta lo que le ha pasado y cómo le ha pasado.

No me gusta ver a nadie arder en el Holocausto Subnormal. Aunque todos vayamos a hacerlo. Vamos todos a morir de viejos en un Holocausto Subnormal. Y nuestros nietos no nos van a abrir museos. Van a taparse la cara de vergüenza cuando les recuerden que sus antepasados murieron en la Residencia de Veteranos, contandose chistes de Irene Villa al oido, masacrados en el Holocausto Subnormal. Y hubieramos preferido Verdún al Holocausto Subnormal. Al menos no había que salir fuera de la trinchera para poder fumar. Somos la primera generación que muere asfixiada sin que se use ningún gas mortífero. Así es el Holocausto Subnormal. Del Holocausto Subnormal se podrá bromear (¡Vaya si se hará!) Nadie tendrá que pedir perdón por haber hecho una gracia acerca de todos los que murieron en el Holocausto Subnormal.

Amor en el hipermercado

Empecemos con una estadística triste: El 71% de los hombres busca el amor en los pasillos del Mercadona. No en parques, ni en bares, ni en el gimnasio, ni siquiera en internet (aunque yo personalmente prefiero bancos y campos de golf). No. Es entre pizzas Hacendado y anchoas en lata donde un gran porcentaje de solteros esperan encontrar su media naranja. Internet hasta ahora ha sabido sacarle provecho al monopolio que ejercía como líder en el mercado del amor bombardeándonos con anuncios, pop ups, y anuncios pop up. Grindr de pronto se hace hetero para hacer lo propio entre casaderas desesperadas. El gigante de Wallmart, Asda, no iba a dejar de explotar su condición de nido de amor, y ¿cómo? Pues haciendo lo que mejor sabe hacer: Vendiendo comida.



Bajo el slogan: “Compara tu carro de la compra. Encuentra el amor” ASDA lanza en San Valentín un servicio de citas en el que en lugar de perfil (atención a esto) lo que vemos del posible candidato son los productos de su lista de la compra. Es decir, yo no soy Pussy Galore, de tantos años, y tales características físicas, sino que soy gambas congeladas, leche fresca, albóndigas en salsa y pan sin corteza. ¿Cómo funciona? Pues muy sencillo. Cuando terminas tu compra on-line, marcas la casilla que dice: “Busco amor” para entrar en la aplicación comparativa de productos. El programa selecciona otros clientes que compran productos similares a los tuyos y te mandan su perfil.

Porque está claro que si como yo, alguien compra pan y leche, estamos destinados. O si se comparte una pasión por el Lambrini, no cabe duda de que hay amor latente. Pero no estoy escribiendo esto con cinismo. No sé si se debe juzgar una persona por el color de su carro, pero a fin de cuentas yo juzgo a todo el mundo que no soy yo. Todos juzgamos según las compras, ¿o no os habéis sorprendido nunca en un supermercado mirando un carro ajeno e imaginándoos qué tipo de persona compra esos productos? No, en realidad me parece una idea magnífica. Es un servicio en el que todos ganan, Asda vende más, sus clientes encuentran el amor y todos felices. Está claro que si te gustan las emociones fuertes, puedes quedar con el Sr. Mr. lubricante, guantes de goma, bolsas de basura industriales, una pala, cinta adhesiva, la peli Taxi Driver y cuchillos. Te estará esperando en la sección de bricolaje y llevará chándal y un pasamontañas. Si por el contrario quieres adoptar un novio al que cocinar, lavar la ropa y recoger los calcetines acartonados de debajo de la cama, te podría sugerir el Sr. sidra, Marca, platos de plástico, revista Nuts, lasaña congelada, paquete de Pueblo. O si eres chico y quieres pasarte los domingos viendo pelis de Julia Roberts, puedes contactar con Srta. comida para gato, azúcar, multi pack de kit kats, kleenex y paracetamol con codeína. O si quieres una ortoréxica, Doña avena, tofu, macarrón integral y pasas, servirá perfectamente. Y podría seguir durante horas. Su idea de una noche romántica, hobbies, obsesiones, salud y futuras enfermendades, gustos, ideologías, incluso la zona en la que vive, donde y cuando sale… podríamos rellenar una ficha completa teniendo acceso a ese único dato: su carro de la compra.




Pero mientras esperamos a San Valentín para que el servicio se haga disponible, si eres de los que iba a comprar las lentejas en chándal, quizá quieras replantearte la elección y optar por un atuendo más propio de un primer encuentro con el amor de tu vida, desconozco cual es la etiqueta adecuada para la ocasión, lo que esta claro es que el contexto es justo junto entre los garbanzos lechosos y la levadura royal.

lunes, 7 de febrero de 2011

DUET

Ministerio de Igualdad



En un imperio no vasto, sino más bien pequeño, gobernaba un Consejo de sabios dentro de la tranquilidad de los hechos que asumiblemente se consideraban normales por las normas socialmente aceptadas: robos, violaciones, felonías, estupro y violencia entre los diferentes ciudadanos de aquel reino.

Pasadas unas centurias el reino fue creciendo no geográficamente pero sí en población y los diferentes grupos sociales así llamados fueron incrementando sus actos anteriormente nombrados. La otredad social los juzgaba (socialmente, claro está), pues era el Consejo, mediante el monarca aleatoriamente elegido por éstos, quien decidía sobre asuntos jurídicos y administrativos siempre y cuando no pudieran autorregularlos los propios grupos o entraran en conflicto. Así, este país de ciegos encontró una designación en cada uno de los estamentos que la componían, siendo las denominaciones (adjetivaciones) las que le definirían.

Por orden creciente estaban primero los ciegos acondroplásicos: carecían de poder físico (comparativamente hablando) debido a su reducido tamaño y las limitaciones acarreadas por su estatura les obligaban a dedicarse a las tareas que estuvieran a su altura: los labores de la tierra. Eran un grupo numeroso y sus huertos alimentaban al resto del reino sin ellos obtener nada a cambio (material) que la no coacción física. Todo ello escrito en los renglones del consciente colectivo con la indeleble tinta del miedo, como era natural de suponer.

Luego, el estrato compuesto por los cazadores que eran un poco más altos que ellos se caracterizaban exógenamente por estar cubiertos de pelo por todo el cuerpo. De musculatura formidable, eran hábiles con los artilugios manuales y las armas, por ello también componían la milicia de aquel miasmático paraje, aunque nunca peleaban con nadie salvo, claro está, con los animales que mataban y que conformaban a su vez una representación fálica de su propio yo dentro del sistema de valores y representaciones internamente desarrollado. Su reputación social era más estimada que la de los enanos como era de esperar y sus únicos problemas eran las altas temperaturas que tenían que soportar en verano debido a su perenne hirsutismo.

Un paso más arriba y siempre en una escala establecida por el tamaño en orden menor-mayor estaban los gordos, que constituían el grupo social mayoritario más reducido. Su eterno estatismo les dotó de una astucia sin par en el comercio y una locuacidad capaz de hacerles vender hasta la sangre de sus respectivas abuelitas llegado el caso.

Más arriba aun, estaban los cíclopes, caracterizados por su enorme tamaño, si los comparamos con los demás estratos, y con la facultad infinitamente superior de la visión, que les hacía, a todas luces, los Nureyev del reino. Constituían el denominado Consejo y eran ellos quienes designaban las diferentes políticas sociales y económicas y elegían un monarca que se constituía en la cabeza visible de ese pequeño territorio, a quien comúnmente solía llamarse, naturalmente, el Rey Tuerto.



En cuanto a las interrelaciones sociales colectivas, cabe decir que cada uno poseía su espacio delimitado territorialmente, en lo que se conoció en una época como coexistencia pacífica, tan solo por el mero hecho de mantener el status quo, porque cuanto menos, “los peludos” así conocidos por los demás pudieran haber acabado con cualesquiera de sus vecinos-enemigos. Pero la pereza y la desidia de no poder comer vegetales todos los días les habían llevado a no haber acabado nunca con los pequeños y laboriosos enanos.

Aún así, los enanos eran víctimas de la constante burla de sus vecinos que los increpaban y gastaban bromas constantemente: “inspector de zócalos”, “chichón del suelo” y otras lindezas eran esgrimidas en tono burlón a los enanos desde los guetos de hirsutos. Los enanos, por su parte, gustaban del sarcasmo y la burla ante el estamento más obeso: “bola de sebo”y “bolsa de pedos” eran las denominaciones favoritas que utilizaban contra aquellos orondos comerciantes.

A los tuertos poco les importaban estas rencillas y mucho menos las demás prácticas que dentro de cada uno de los estamentos realizaban dentro de sus propios ritos y costumbres, nos referimos, a las violaciones, estupros y demás prácticas nombradas en el primer párrafo, pues constituían un patrimonio de bien cultural basados en la libertad, y aquella denominación bien bastaba para dejar obsoleto cualquier argumento. Mientras el orden de producción se mantuviera, todo estaba en orden, valga la redundancia.

Hasta que un buen día…

Con el paso de los años, los enanos se volvieron más fértiles y debido a un período de gestación mucho menor al de las otros estamentos se multiplicaron de manera tal que su peso social se fue haciendo más fuerte, lograron que los impuestos al enano se bajara en un porcentaje considerable e incluso llevaron al rey, una propuesta. “Queremos que nos respeten por el solo hecho de ser enanos, no más mofas, no más zócalos, no más… no más”… se escuchó en la sala de audiencias del monarca al que le parecieron retumbarle en sus tímpanos aquellas hilitos de voces tan agudas. El Rey trató de convencerlos de que consuetudinariamente las cosas eran así, y no había porqué cambiarlas. Sin embargo, el poder de aquellos minúsculos seres (siempre dicho esto desde la comparativa objetiva) y el incremento en el consumo y por tanto, necesidad de hortalizas y vegetales lograron convencer al ciclópeo monarca que publicó, a través del Consejo de videntes, un bando en el que declaraba la igualdad entre los distintos estratos. Dentro de la extensa reglamentación consideraba punible la mofa o burla en contra de los seres más pequeños.



Los enanos, consecuentemente, obtuvieron el reconocimiento social demandado y ampliaron su espectro de derechos cobijados bajo la mohosa sábana de la injusta igualdad, igualdad positiva que abrazó a los pequeños seres y dejó a la intemperie a los simpáticos gordinflones y a los belicosos hirsutos que sordamente protestaron por el contradictorio título de la norma y ya de paso, por la norma en sí. En aquel enjambre de significados y resignificaciones se conformaron con un abaratamiento en los costes de la carne de matanza en un acuerdo entre ambos. Pero sobre todo protestaron por aquel jugueteo terminológico, aquella sensación como de haber sido víctimas de una hipnosis mesmeriana.

domingo, 6 de febrero de 2011

viernes, 4 de febrero de 2011

jueves, 3 de febrero de 2011

MAPA DEL PEGAMÍN

Pulsa sobre la imagen para verla más grande, anónimo torpe

miércoles, 2 de febrero de 2011

Iconos pegamin: La vieja del Lidl

Entro en el Lidl y en el pasillo de la verdura, entre tomates pochos y rábanos sucios, me la encuentro de frente.

Lleva un camisón de abuela desgastado, un abrigo verde medio caído y una media cuelga a mitad de pantorrilla. Juraría que calza unas pantunflas rosas. Camina hacia mi y va hablando sola, aunque me mira intensamente. Entonces lo veo.

Una espesa, espesísima baba cubre su barbilla. Nuevos colgajos se suman a la fiesta cada vez que dice una palabra. Cuando me cruzo con ella el tiempo se ralentiza: el frigorífico de los lácteos, al fondo del pasillo, es mi meta pero su cara se gira en mi dirección y vuelve a proferir palabras en un lenguaje extraño. Consigo esquivarla y comprar un yogurt, pollo, lechuga, tomate, calabacín, champiñones, plátanos y pizza congelada.

En la caja me la vuelvo a encontrar. Ha comprado una botella de agua.
Paga.
La cajera dice: Faltan dos céntimos
La mujer contesta algo y llena de babas a la cajera, que ni se inmuta.
Faltan dos céntimos, repite.
Babas sobre la cajera.
Faltan dos céntimos.
Babas sobre la cajera.
Faltan dos céntimos.
Babas sobre la cajera.
Faltan dos céntimos.
Babas sobre la cajera.

Pues a mí me hace gracia...